¿Por qué ya es tan importante el ‘Influencer’ Marketing en los negocios?

Si bien algunos ya saben de qué se trata y lo hemos mencionado en oportunidades anteriores, el hecho es que el  ‘Influencer’ Marketing viene como “una ola” cobrando cada vez más fuerza en el mundo de los negocios y arropando las formas tradicionales de generar ingresos.

Para aquellos que se quedaron en la radio y en la TV, o los que consideran que una estrategia eficaz para atraer clientes en sólo publicar imágenes en redes sociales, el ‘Influencer’ Marketing se refiere a publicitar una marca mediante un “influenciador”, figuras públicas que con el creciente reinado de las redes sociales generan contenidos y llegan a miles y millones de personas, ejerciendo sobre éstas una importante influencia en la intención de compra.

¿Por qué cada vez más empresas vuelcan su mirada hacia los influencers?

Bien, pongámoslo así. Hasta hace poco tiempo, antes de que el internet se apoderara de la economía, hablar de marketing se refería a gastar enormes sumas de dinero en un equipo creativo, personal de comunicaciones, vallas en las autopistas y anuncios de TV con la intención de que alguien reconociera a la marca, explica el medio especializado Fortune.

Lo anterior, para muchas empresas, se ha venido traduciendo en tácticas tradicionales relativamente ineficientes y difíciles de medir. En una entrevista con la editora senior de dicha revista, Mike Heller, fundador y CEO de Talent Resources, una empresa publicitaria, dijo: "Cuando usted tiene un influencer que tiene 30 millones de seguidores, 20 millones, cinco millones, eso es más poderoso que cualquiera de los otros medios de comunicación tradicionales por ahí".

¿Por qué esta revolucionaria técnica funciona?

Además de que los costos son relativamente inferiores, la facilidad de producción y que no son anuncios que el consumidor pueda o quiera saltarse, lo que hace “magia” con este tipo de marketing es que la gente confía y se identifica con las personalidades que siguen, es decir, que básicamente le van a gustar las marcas que utiliza dicha personalidad, siempre y cuando ese producto vaya alineado con el estilo de vida del influenciador. Es como el típico ejemplo  psicológico en que alguien busca vestirse o parecerse a las figuras con las que se identifica, bien sea un cantante, un deportista, entre otros.

Casos de éxito

Si hablamos de marcas y personas que han generado cuantiosas sumas y posicionamiento a través de esta metodología, el periódico El Emprendedor cuenta con un abanico totalmente amplio, desde el británico al que la compañía de galletas Oreo le paga 25.000 dólares por cada video viral, hasta los numerosos ejemplos de personas que han producido enormes ganancias como Sara Tasker, Mariam Ezzeddine y Adhmed Shourbagy sólo publicando a través de Instagram, por sólo mencionar algunos casos.

Si hablamos de Youtube, en números, durante el 2016 los influencers produjeron: Roman Atwood ($8 millones), Lilly Singh ($7.5 millones), Smosh ($7.5 millones), Rosanna Pansino y Tyler Oakley ($6 millones), Markiplier y Germán Garmendia ($5.5 millones), Rhett and Link y Colleen Ballinger ($5 millones).

Casos venezolanos

Venezuela, a pesar de tener limitaciones con el tipo de cambio y las entidades bancarias, no se ha quedado atrás en el negocio de “impactar a miles” y millones de personas con canales pioneros como el de Ángel David Revilla “Dross” en 2007, Alejandro Hernández, en 2009,  y más recientemente con Pedro Joao, “La Divaza” y Javier Romero, con 2 millones de seguidores y 200 mil seguidores respectivamente.

Asimismo, a finales del año pasado se reseñó que la Influencer Rebeca Moreno fue contratada para promocionar la tienda de decoración de eventos Cassis, la cual tiene 12 años en este nicho de mercado.

Finalmente, sólo queda agregar que las posibilidades son infinitas para quienes saben adaptarse y sacar provecho a las nuevas tecnologías, tanto para aumentar la rentabilidad y exposición de una empresa, como si se quiere emprender en el negocio de impactar a la gente.