Más allá del Bitcoin: las oportunidades que esconde el Blockchain

Mucho es lo que se oye y lo que se lee acerca del Blockchain. No obstante, para un enorme número de personas sólo se trata de la tecnología que está detrás de la popular moneda virtual, Bitcoin.

Esto de alguna manera ha preocupado a muchos conocedores del área, pues, a pesar de que esta tecnología fue descubierta en el 2008, quizás los esfuerzos para darla a conocer han sido muy técnicos impidiendo que todos se hagan conscientes de que estamos atravesando una verdadera revolución tecnológica comparable a la llegada del internet.

La necesidad de información

Samantha Yap, estratega y articulista del medio especializado Tech in Asia precisó a través de un artículo que hoy en día debería estar más que claro que el Blockchain o cadena de bloques van a jugar un papel muy importante en nuestro futuro, pero no es así.

“El 59 por ciento de los consumidores en todo el mundo dijeron que nunca habían oído hablar de la tecnología blockchain, según una encuesta de HSBC. La encuesta, que consultó a 2.000 personas del Reino Unido y 1.000 de Canadá, China, Francia, Alemania, Hong Kong, India, México, Singapur, los Emiratos Árabes Unidos y los EE. UU., también descubrió que el 80 por ciento de quienes han oído hablar de blockchain no entienden lo que es”, apunta Yap.

¿Qué lo hace único?

La revista especializada The Economist define el Blockchain como una base de datos distribuida que mantiene un listado de registros, o bloques, que está continuamente en crecimiento.

Lo anterior quiere decir que se trata de una base de datos digital donde se pueden hacer múltiples transacciones, y no sólo financieras.

Lo interesante de ello es que no hay intermediarios que controlen o “corrompan” el sistema, ya que no se puede cambiar la información contenida dentro de un bloque, porque cada uno de ellos tiene una marca de tiempo y contiene un enlace a un bloque previo, es como un respaldo infinito de la información.

Los Blockchains se comportan de manera innata como una especie de inventario digital público. Durante la intervención de Ángel Salazar, co-creador de la criptomoneda venezolana OnixCoin en el evento Oportunidades de Negocios 2018, explicó que la cadena de bloques, o Blockchain “es lo más parecido, en la práctica, al socialismo”, pues es un sistema que acabó con el problema de la centralización y es transparente.

Una vez siendo conscientes de lo anterior, todo parece apuntar a que las posibilidades de crear modelos de negocios a partir de esta tecnología son infinitas.

Las oportunidades de negocio

En este orden de ideas, convendría preguntarse aún más allá: ¿pueden los emprendedores resolver diferentes problemas sociales mediante este sistema?

Expansión, de CNN, reveló hace poco cuáles serían “los tres usos del Blockchain que están por explotar en América Latina”. Micropréstamos, transporte y auditoría de procesos de gobierno figuran entre las distintas alternativas.

“En una región con baja bancarización pero en la cual 50% de la población tiene un smartphone –según un reporte de GSMA– el acceso a una cartera de criptodivisas que pueda emitir préstamos de montos pequeños con aval de la comunidad, y no de un banco, elevaría el nivel de inclusión digital y el acceso al crédito en la región”, explican.

Asimismo, destacan la aplicación de esta tecnología en usos urbanos, donde “se ocuparía como un formato único de pago automático de los diferentes sistemas de transporte de una ciudad, incluso para autos compartidos o coches autónomos, en un futuro a más largo plazo”, apunta.

En tercer lugar, por la impenetrabilidad del Blockchain, también ha sido sugerido en Latinoamérica para su aplicación a procesos políticos o de gobierno, como el voto avalado o sistemas de auditorías en procesos gubernamentales.

Esto es sólo una parte del pastel, pues, como lo hemos venido reseñando, el Blockchain es aplicable a modelos de negocio como el control de venta de drogas legales, sistemas de identificación para el sector turismo, control de expedientes médicos, solución para contrabando, copias o falsificaciones, medir la producción de café, entre otros.

Queda a conclusión del lector, bien sea que se maneje dentro del ámbito informático, o no, las posibilidades de la revolución tecnológica que llegó para quedarse.