¿Cómo las redes sociales pueden hacer de su pasión un negocio rentable?

En los últimos años, la pérdida del poder adquisitivo de los salarios en Venezuela ha llevado a más de uno a idear una fuente de ingresos distinta o adicional al sueldo percibido, por lo que buscan dar con el negocio ideal para generar ingresos.

Asimismo, recientemente se viene dando un fenómeno mundial con gran impacto en el país y es el de las redes sociales, que pese a ser subestimadas por algunos sectores comerciales, podrían constituir la vía para hallar ese negocio perfecto o posicionar el ya existente dándole el uso adecuado.

Según uno de los últimos estudios realizados al respecto en el país, por Tendencias Digitales, 9 de cada 10 venezolanos posee una cuenta en Facebook y 7 de cada 10 tienen cuenta en Twitter, el 86% afirma visitar constantemente YouTube y cerca del 50% asegura tener una cuenta en Instagram, cifras que a la fecha mostrarían incremento dado su alcance progresivo.

Ante este contexto, quizás la pregunta del lector es: ¿Pueden las redes sociales convertir algo que me apasiona en un negocio rentable? No hay mejor forma para responder a ello que con un caso de éxito, y es que la propia revista Forbes conversó con los dueños de la cuenta Dogs of Instagram, cuya red social hizo de su afición a los canes, un sólido negocio.

En este momento la cuenta ya superó los 4 millones de seguidores y  Lucy & Co es la compañía que surgió de ella. Adhmed Shourbagy pensó un día que sería divertido crear una cuenta para subir fotos acerca de su pasión por los perros, contando con sólo 70 seguidores cuando hizo su primera publicación.

Posteriormente conoció a su actual pareja, Ashley Paguyo, apasionada también por el tema, con quien intercambió ideas y la cuenta fue creciendo hasta que al cabo de un mes ya contaba con una comunidad de 10 mil personas.

Todo fue un hobbie hasta que al cabo de unos 6 meses el número subió a 40.000 y uno de los secretos de su éxito fue la interacción con esa comunidad, donde los usuarios envían las fotos de sus mascotas para ser publicadas en Dogs of Instagram.

Dados estos números, recibieron varias solicitudes de patrocinio, sin embargo, ese no era “el camino” que querían. La pareja, proveniente de un fondo minorista, quería crear la manifestación física de su pasión por los perros para su comunidad de seguidores y así es como terminan creando Lucy & Co una empresa de ropa y accesorios para perros.

La historia de Dogs of Instagram resulta aleccionadora tanto para aquellos que desean monetizar sus aficiones, como para mejorar la relación que actualmente tienen las empresas con sus comunidades de seguidores en las redes sociales.

Baldwin Cunningham, colaborador de Forbes, precisa en el mismo artículo que generalmente el empresario ve las redes sociales como una “publicidad gratuita” y tratan a sus seguidores como si se tratara de otro canal de marketing.

“En realidad, los medios sociales son el lugar donde te encuentras con nuevos clientes potenciales que comparten pasiones y valores similares a tu marca, pero para convertirlos en clientes se necesita tiempo e inversión. Las personas esperan que las marcas ofrezcan valor en forma de contenido y conversaciones interesantes, incluso antes de que hayan comprado nada”, explica.

En este orden de ideas, el caso de los perros de Instagram, constituye un proceso comercial interesante donde se rompe totalmente el paradigma de “primero el producto y después la comunidad (el mercado)”, sino a la inversa.

Finalmente, para aquellos que sueñan con hacer de sus gustos e intereses el negocio de su vida, el autor deja una interesante fórmula “que no enseñan en las escuelas de negocios”: 1) Abra una cuenta de Instagram de algo que ame 2) Trabaje cuidadosamente en construir una comunidad alrededor de esa pasión compartida y verá como los números crecen 3) Traduzca ese interés en algún negocio minorista que pueda ofrecer a su comunidad.