¿Venezuela estaría por convertirse en una "economía de remesas"?

La semana pasada, la economía venezolana presenció uno de los vuelcos más importantes que se han visto en los últimos años. Eso se debe a que, por permisos gubernamentales, Zoom, Italcambio e Insular, se estarían convirtiendo en las primeras empresas para la recepción oficial de remesas, una figura que no existía en nuestro país desde hacía varios años.

No solo eso, sino que el valor de las divisas extranjeras incrementó de forma exponencial, para pasar de estar en los 80.000 bolívares por dólar, a ubicarse en 1,3 millones de bolívares. El precio, que fue considerado por muchos como "poco competitivo", no se mantuvo más de una semana, ya que pare este lunes subió hasta los Bs. 2.200.000 bolívares.

¿Venezuela se convierte en una economía de remesas?

La realidad es que este precio del dólar, que estaría muy cerca del que tiene en el denominado mercado negro, parece indicar que lo que se busca es atraer un porcentaje significativo de las remesas que se envían a Venezuela diariamente. Eso es algo que no se habría hecho en ninguno de los otros sistemas oficiales de adquisición de divisas.

Con la mayoría de los caminos para la recepción de divisas completamente bloqueados, ya sea por el default o las sanciones internacionales; con la caída de la producción petrolera a una de sus peores cifras históricas, que incluso ha llevado a que se suspendan los envíos hacia ocho países de Petrocaribe; y con una carencia de confianza por parte de inversionistas nacionales e internacionales, todo parece indicar que este es uno de los últimos recursos que le quedan a la nación para obtener divisas.

Una economía que realmente no existía en el país

Aunque mucho se afirmara que Venezuela ya se unió a la lista de países que viven con base en las remesas, debido a que desde que incrementó la diáspora gran parte de las familias viven a costa de los emigrantes, la realidad es que en nuestro país nunca se ha implementado formalmente una economía de esta naturaleza.

Como lo explicamos recientemente, el dinero recibido de venezolanos en el extranjero (contabilizado en alrededor de 6 millardos de dólares) no puede considerarse remesas debido a que estas divisas no ingresan al país, sino que solo hay un traslado de bolívares. Eso se debe a que el dinero nunca ingresaría formalmente, simplemente se mueve de una mano a otra entre personas o empresas con potencial para generar, e invertir, divisas

¿Hacia dónde van estas remesas?

Aunque nunca se haya realizado un anuncio oficial sobre el completo funcionamiento de este sistema, así como la variación de precios que el mismo presentará de cara a los próximos meses, se sabe que estas remesas estarían siendo utilizadas para alimentar el Sistema de Divisas de Tipo de Cambio Complementario Flotante de Mercado (Dicom).

Al recibir las remesas, las casas de cambio no hacen entrega en moneda extranjera a los receptores, sino que solo tienen la opción de realizar una transferencia en moneda nacional, rigiéndose por las regulaciones vigentes de Venezuela. Aunque el sistema apenas lleva una semana funcionando, y fue recientemente que se colocó un precio competitivo, se desconoce cuáles son las previsiones para el mismo.

Puede que, por lo polémica que se ha vuelto esta situación, no se haya realizado ningún tipo de comunicado en el que se confirme la estrategia de convertir a Venezuela en una economía de remesas, sin embargo, todas las acciones llevadas a cabo en las últimas semanas parecen indicar que esto es así. Igualmente, la pregunta queda abierta.