¿Venezuela vuelve a alejarse de la unificación cambiaria?

Esta semana se anunció que empresas como Zoom, Italcambio e Insular, comenzarían a funcionar como casas de cambio para que los venezolanos en el extranjero pudieran enviar remesas a sus familiares en el país. De acuerdo al primer anuncio, el precio (que puede variar con el pasar del tiempo) se ubicó en 1.303.270 bolívares por dólar.

Este anuncio no solo generó polémicas debido a diferentes aspecto del hecho, por ejemplo, un cambio muy inferior al que se maneja en el mercado negro, una falta de confianza institucional que no se ha tratado, la inexistencia de un mercado de remesas, entre otros;  sino también por una característica que parecía más preeminente que las demás: ¿nos alejamos nuevamente de la unificación cambiaria?

El dólar vuelve a dividirse

Eso se debe a que en los días previos al anuncio de la “reactivación” del mercado de remesas en el país, también se daban a conocer los resultados de la decimoséptima subasta Dicom, en la que el dólar se ubicaba en alrededor de 80.000 bolívares por dólar, una cifra que está muy por debajo de la impuesta en el sistema de remesas.

Es importante destacar que a inicios de este año, aunque no se hizo de manera formal, se llevó a cabo un proceso de unificación cambiaria cuando se eliminó la tasa de cambio protegida Dipro, que en aquel entonces se cotizaba en 10 bolívares por dólar, mientras que el valor del dólar en el mercado negro era cercano a los 250.000 bolívares.

Debe recordarse también que de acuerdo a los reportajes más recientes, los subastas Dicom han mostrado una gran inestabilidad en cuanto a la asignación de divisas entre una edición y la siguiente, pero no solo eso, sino que en general, la cantidad de dólares que han sido vendidos a través de este sistema apenas alcanza los 13 millones de dólares, una cifra muy por debajo a la esperada.

¿Qué significa esto para la economía?

Esto último es muy importante ya, que similar a como ocurrió con el Dipro en su momento, un tipo de dólar que apenas podía ser adquirido por algunas empresas selectas, y donde la divisa extranjera se vendía a un precio muy por debajo de otros sistemas impuestos por el propio gobierno, no harían más que generar confusión, e incluso corrupción.

En cuanto a la confusión, principalmente estaríamos refiriéndonos a la cantidad de personas que decidan alimentar las subastas Dicom con sus propios dólares, ya que parece improbable que alguien (ya sea persona natural o empresa) decida comercializar divisas a Bs 80.000 por dólar, cuando en el sistema de remesas se comercializa a un precio más de 10 veces mayor.

Al hablar del tema de la corrupción se trata de una situación que formó parte de la opinión pública durante todo el tiempo que operaron las tazas de cambio dispares, en las que se afirmaba que las que tenían el valor inferior eran adquiridas solo por un cierto grupo de personas que no las invertía en el desarrollo del país, sino que las revendía en el mercado negro para obtener enormes rendimientos.

Aunque no se haya realizado ningún anuncio o pronunciamiento que oficialice la desunión cambiaria en nuestro país, la realidad es que el lanzamiento de una tasa de cambio tan dispar como lo es el dólar “remesa”, parece indicar que en efecto la unificación iniciada en el primer mes del 2018 habría llegado a su fin.