Explican cómo evitar la huida de los empleados venezolanos

El personal humano es lo más valioso que puede tener una empresa, sin embargo, la situación económica hace complicado el manejo de este equipo, reduciendo la productividad general de la compañía. Así lo asegura Sophía Kossman, CEO de la firma SK Asesores Empresariales, a quien entrevistamos para conocer qué puede hacer el jefe o gerente venezolano para mantener el rendimiento óptimo de su equipo humano.

"Lo que hagas por tu equipo no será un gasto sino una inversión", Kossman inicia la entrevista con esta frase, asegurando que un empresario no puede ver a su personal como un activo más, sino que debe ser capaz de mantenerlo satisfecho para que no se vaya de la empresa. Sin éste, un proyecto no es nada.

En Venezuela, como uno de los efectos más dañinos de la situación económica actual, se ha agudizado la escasez de profesionales capacitados para ejercer funciones dentro de una empresa. Esto se debe a que los empleados se sienten cada vez menos motivados a trabajar en puestos que les brindan beneficios mínimos que, en muchos casos, ni siquiera le bastan para satisfacer sus necesidades básicas.

El nuevo empleado venezolano

Kossman afirma que debido a esta desmotivación que existe en la fuerza laboral, la misma se está volviendo mucho menos efectiva en todo el país. Estos problemas que pueda tener el empleado lo convierten en "una fuente potencial para cometer errores", lo que se traduce en mayores pérdidas para la empresa.

A esto se suma el hecho de una mala cultura laboral que se ha venido arrastrando desde hace décadas, donde un empleado recibía bonos por cumplir sus responsabilidades más básicas. Kossman asegura que premiar al empleado es ideal, pero siempre que sea por labores que superan las expectativas, no cosas como la puntualidad o el cumplimiento de códigos.

Esto se debe a que, con el incremento en el costo de nómina, gran parte de las empresas ha optado por eliminar estos bonos "mal instaurados" en el pasado. Es por eso que cada vez hay más empleados inconformes porque sienten que sus jefes están quitándoles beneficios lógicos.

Ante esto surge más que nunca la necesidad de mantener satisfecho al personal existente para lograr que la empresa crezca sin contratiempos internos. Un empleado productivo se traduce irremediablemente en una fuente de ingresos para la compañía, lo que es a su vez un retorno de inversión para el gerente.

¿Cómo me rodeo de la gente adecuada?

En esta tarea, Kossman asegura que con la experiencia un jefe o gerente puede desarrollar las habilidades para rodearse de la gente adecuada, sin embargo, esto no se aprende con facilidad. Para eso existe una serie de test conductuales que funcionan para determinar si una persona puede ayudar a la empresa a producir, o por el contrario, le generará problemas.

Estos test que son provistos por la empresa a través de sus servicios de asesoría en Recursos Humanos, y son los siguientes:

1. El test del estado emocional: este funciona para determinar cómo es la actitud de la persona en cuanto a la vida y el trabajo, además de cuáles son sus habilidades de comunicación y su nivel de ética. Con éste se determina si la persona tiene tendencias criminales, si puede dañar la dinámica de grupo, etc.
2. El test de coeficiente intelectual: Con éste se determina el nivel o grado de la capacidad de resolución y manejo de problemas. Se puede tener a una persona como gerente de un área, pero si tiene un IQ muy bajo no tendrá la capacidad de manejarla, por ejemplo, estadísticamente se sabe que una persona con un IQ menor a 80 puntos no tiene la habilidad para dirigir un grupo. Por eso es vital la realización de este test.
3. El test de duplicación: determina si la persona es capaz de seguir normas y procedimientos. En ese test, si una persona tiene un buen puntaje, significa puede realizar una serie de acciones muy específicas dentro de la compañía. Así se determina la capacidad de la persona de estar bien en la sociedad y de seguir normas e instrucciones. Sin embargo, es importante que se tomen en cuenta los otros test para complementarlo.

Ya tengo a mi equipo conformado, ahora ¿Cómo sé que se desempeña correctamente?

Kossman asegura que lo importante en estos casos es tener un equipo cuyas tareas están bien delimitadas y organizadas para poder utilizar estadísticas simples con las que medir el desempeño. No importa la cantidad de empleados, ya sea 1 o 100, sino una estructura organizativa que mantenga la data de la empresa bien ordenada para que pueda medirse.

Estas personas deben tener un plan específico de las tareas que realizarán y el tiempo que va a tomarles concretarlas. Kossman explica que además de estas mediciones ordenadas, también vuelven a aplicarse los test de manera periódica para medir los cambios del empleado.

¿Cómo retengo y satisfago al buen empleado?

Con el veloz incremento de la inflación que se está dando en los últimos años en Venezuela, los sueldos que una empresa puede ofrecer cada vez funcionan menos como un incentivo. Es por eso que Kossman recomienda decantarse por el trabajo a nivel personal y emocional.

Un jefe o gerente debe asegurarse de reconocer al empleado como un ser pensante e independiente, haciendo que el mismo no solo se desempeñe en una serie de tareas, sino que realmente se sienta parte del equipo y pueda ver cómo su contribución ayuda a la empresa a seguir creciendo.

Sugiere además la implementación de un sistema de premiaciones conforme a las tareas que cumplan de forma excepcional en su área de trabajo. Los mismos pueden conformarse por bonificaciones económicas o incluso ir más allá, brindando cosas como cenas pagadas, salidas al cine, viajes, entre otros.

Este periodo de desconexión, sin que este tenga que pagarlo por sí mismo, mejora mucho las estadísticas de trabajo y desempeño, y no solo el del empleado premiado, sino el de los que lo rodean, ya que al ver el sistema de premios estos también querrán participar y obtener beneficios.

Gracias a estos consejos, el empleador venezolano puede entender cómo lograr mantener un equipo de trabajo con un rendimiento óptimo incluso en un ambiente irregular, y no solo por las variables macroeconómicas, sino también en caso de problemas internos de la empresa.