7 claves para emprender durante la crisis
- Escrito por Gananci
- Publicado en Estrategia
Emprender durante un periodo de crisis no es sencillo, por lo que es necesario conocer cuáles son las claves al momento de tomar una decisión tan importante
Existe una máxima muy conocida que he leído y escuchado en muchísimas ocasiones acerca de los emprendedores, donde se definen como los vendedores de pañuelos durante las crisis en las cuales la mayoría de las personas están llorando. Yo no comparto esa máxima porque no me parece correcto aprovecharse de otros para nuestros propios fines. Se puede ser emprendedor, tener ambición y detectar oportunidades sin dejar de lado la empatía y el bienestar colectivo, una cosa no está peleada con la otra.
Claro que hay muchos empresarios que lo hacen y podríamos nombrar infinidad de ejemplos acá pero no lo haremos porque en vez de un artículo se necesitaría una biblioteca completa para recabar una pequeña parte de esa información. Pero tú no tienes que seguir los pasos de esas personas inescrupulosas, si adoptas estos hábitos de la gente rica según Gananci, tus probabilidades de tener éxito se multiplicarán aunque la situación que veas a tu alrededor no parezca la más ideal.
En los momentos de crisis puede parecer mucho más complicado tener éxito en los proyectos que emprendamos por la situación de la población en general, pero no es imposible. Lo que sí es necesario es estar conscientes de lo que está ocurriendo para poder tomar medidas que nos protejan ante el fracaso.
Otro elemento que también debemos tener en cuenta es la objetividad. Muchas personas viven hablando acerca de la crisis, pero en ocasiones esa crisis es personal y alimentada por una gestión errónea de sus propios recursos. También existen las crisis económicas o sociales que azotan ciudades, países o continentes enteros y se reflejan en sus cifras y estadísticas.
Esto puede ser percibido desde dos puntos de vista distintos: la aceptación del fracaso incluso antes de que ocurra porque las estadísticas dicen que es lo más probable, o la decisión de estar entre las excepciones exitosas. La crisis no tiene por qué ser la razón por la que te inhibes de emprender nuevos negocios, es más, esta puede ser una de las motivaciones para que lo hagas.
Sin embargo, este también debe ser uno de los aspectos a tomar en cuenta antes de decidir el tipo de negocio que querrás poner en marcha, la industria donde pretendes insertarte y el funcionamiento del mercado, para que no te tomen por sorpresa cuando ya estés en pleno desarrollo de tu negocio.
Si quieres emprender y los números de tu país reflejan que hay problemas en la economía, a continuación, encontrarás algunas claves importantes para que puedas superar esto y tener éxito en lo que deseas hacer:
1.- Innova: si existe crisis o inestabilidad en el mercado donde pretendes entrar y tú quieres ofrecer más de lo mismo estarás en problemas. La innovación quizá sea complicada al principio para conseguir financiamiento, pero si crees en tu idea y se trata de algo cuyo funcionamiento puede comprobarse, tus probabilidades de éxito serán mayores que si te vas por lo “seguro” en un mercado en crisis.
La creatividad te puede dar muy buenos resultados no solo para la creación del servicio/producto que comercializas, sino para crear todo un método en el que puedas ofrecer más valor y mejores experiencias a tus clientes por un precio justo.
2.- Encuentra una necesidad y súplela: así te asegurarás de poder tener clientes siempre. Aunque haya crisis las personas buscan la manera de suplir sus necesidades y si lo haces de una manera innovadora, estarás un paso adelante.
3.- Crea un plan de negocios: de esta manera podrás tener una especie de mapa que te dictará los pasos a seguir para poder llegar de manera exitosa hasta los objetivos que te has propuesto. No importa si tu emprendimiento es online o de modelo tradicional físico. Un plan de negocios puede ahorrarte muchos problemas y llevarte por el camino más seguro hacia el éxito.
Si no sabes cómo hacer uno, aprende cómo armar el plan de negocios de tu empresa y conoce todos los beneficios que te puede traer el planificar lo que deseas hacer. Una vez lo tengas, enfócate en el mismo, el enfoque será vital para alcanzar los resultados propuestos.
4.- Asesórate: contáctate con personas que hayan tenido éxito en momentos difíciles o lee acerca de ellos. Las experiencias de otros pueden ser muy útiles si logras sacar el aprendizaje de ellas sin tener que tropezar personalmente con los obstáculos que ellos tuvieron.
Puede que tengas muchos conocimientos teóricos o hasta prácticos con respecto al emprendimiento, pero cuando lo haces en crisis no es igual. Por esto no debes rechazar la asesoría de otros ni la preparación constante. Nunca sabrás todo, siempre hay espacio para seguir mejorando.
5.- Ofrece calidad: si el producto/servicio que ofreces y la forma en como lo comercializas es de alta calidad, los clientes seguirán yendo a tu negocio a pesar de la crisis. En cambio, si la calidad que ofertas es baja, no puedes culpar a la crisis de la poca afluencia de personas. Las personas a las que les gusta la buena calidad y están dispuestas a pagar por ella cueste lo que cueste rara vez están en crisis.
Para poder ofrecer calidad también debes buscar una industria en la que sea más fácil conseguir los insumos, es decir, si no tienes al menos tres proveedores seguros y fijos para la materia prima, estarás dependiendo de la suerte y serás más propenso a bajar la calidad de tus productos o la oferta.
6.- Invierte en la atracción de clientes: las estrategias de marketing son algo que no puedes dejar de lado en tu presupuesto por más austero que este sea ya que son muy importantes para tu negocio. La publicidad que hagan tus clientes boca a boca nunca será suficiente, por lo que debes poner en práctica diversas estrategias para atraer clientes.
7.- Preocúpate por fidelizar: no es suficiente solo con atraer clientes de una sola vez. Se requiere que regresen y esto se logra poniendo en práctica estrategias de fidelización como buen servicio, posicionamiento, mejora de la experiencia global, entre muchas otras.
Tampoco es suficiente volcar todos tus esfuerzos hacia la fidelización de tus clientes, también debes hacerlo con tus empleados (para tener una tasa de rotación baja) y todos los involucrados en el mismo (proveedores, distribuidores, allegados y más). Esto es algo que no es sencillo y necesita inversión, pero definitivamente vale la pena.