Las estrategias de empresas venezolanas para superar las crisis del COVID-19
- Escrito por El Emprendedor
- Publicado en Mercados
Los empresarios prevén una caída de su facturación en más del 50%, lo que los ha obligado ajustar sus costos operativos y a reducir personal para sobrevivir
Venezuela ha venido atravesando la crisis económica más importante de su historia contemporánea desde más de una década, lo que ha complicado hacer previsiones de rentabilidad para las empresas. A esto hay que sumarle la pandemia del COVID-19, que ha potenciado todos los efectos de la crisis en el país.
Este nuevo escenario ha creado un reto sin precedentes para los empresarios y directivos, que han tenido que hacer cambios sobre la marcha para poder adaptarse a la nueva realidad del mercado. Las medidas gubernamentales también han influido de gran manera limitando las horas productivas de la mayoría de las empresas, y manteniendo algunos sectores completamente paralizados.
Por eso, varios especialistas estiman una caída mayor de la economía venezolana
Ante esta coyuntura surgen las siguientes interrogantes: ¿Cuáles son las perspectivas de cara a los próximos meses para las organizaciones? ¿Existe alguna posibilidad de crecimiento en el corto plazo?
Consecuencias financieras para las pymes
Cada vez es más complejo sostener las operaciones de las empresas, especialmente las que no forman parte de los sectores primordiales para la población. Así lo demostró la última encuesta realizada por KPMG, firma de consultoría y análisis financiero, donde quedó plasmado que el 49% de los empresarios consideran que la facturación de su organización disminuirá en los próximos 12 meses.
Fueron más de 100 directivos consultados para conocer su opinión sobre los siguientes pasos a seguir para superar el COVID-19. En este sentido el 57% planea reducir su personal para poder afrontar los retos de la depresión económica post-cuarentena, lo que significa que estas medidas gubernamentales generarán más problemas para los venezolanos.
Por su parte, el 50% tiene pensado reducir las inversiones en los próximos meses, entrando en un momento de reducción y ajustes de capital para poder optimizar todos los recursos con los que cuentan en la actualidad.
Estrategias empresariales durante la pandemia
Los ajustes económicos que tienen que hacer los empresarios y gerentes para poder mantener las operaciones a pesar del COVID-19 no son sencillas, estando la mayoría en modo supervivencia para no bajar las santamarías. La mencionada encuesta de KPMG ha revelado que el 68% de los directivos modificó su estructura de costos para poder hacerle frente a los retos venideros en los próximos meses.
Además de este ítem, la plantilla laboral también han sufrido reducciones, ya que un 50% de los encuestados afirmaron que tuvieron que despedir personal para seguir trabajando. Esto va ligado a la merma en los ingresos que han tenido producto de la cuarentena.
Este ámbito es vital, ya que el impacto de la pandemia ha provocado cambios profundos en el patrón mental del consumidor, a tal punto que varios especialistas señalan que las compras no volverán a ser como antes en muchos rubros. La preocupación por la salud, aplicaciones, servicios de entrega y plataformas digitales son algunas de las tendencias a las que tendrán que adaptarse para poder competir.
Sin embargo, la transformación digital es el área de mayor interés para los encuestados, con un 56% de los empresarios revelando tener esta área como su prioridad para los próximos años, siendo las alianzas y re-estructuraciones algunas de las estrategias para mejorar su situación económica y estabilizarse de cara al futuro.
Las empresas requieren apoyo
Nadie duda del impacto que ha provocado la pandemia en el mundo entero, especialmente en Venezuela, que tiene más de 7 años consecutivos en recesión. Para que los empresarios puedan hacer crecer sus organizaciones necesitan del apoyo continuo de un gobierno enfocado en el desarrollo empresarial.
Fomentar la inversión y reducir la presión fiscal son algunos de los pedidos que hacen algunos industriales, ya que los pasivos laborales se siguen acumulando sin que la producción eleve sus niveles. A esto hay que añadir la mejora en los servicios públicos, especialmente el de la electricidad, agua y gasolina, que son indispensables para la producción y distribución de productos en el país.
Este es el panorama venezolano para los próximos meses del 2020 y el inicio del 2021. El decreto de emergencia nacional se ha extendido hasta finales del mes de septiembre, aunque no hay atisbos de levantamiento y la cifra diaria de contagios supera el millar de casos.
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