La lección que deja la reciente bancarrota de grandes empresas estadounidenses

Esta semana se dio a conocer que Sears, la tienda por departamentos estadounidense fundada hace más de 100 años, estaría a pocos días de declararse formalmente en bancarrota, sumándose a la larga lista de grandes empresas que han "caído en desgracia" debido a las nuevas formas de negocios que existen en el mundo.

Sin embargo, la realidad es que estas empresas no habrían caído en bancarrota debido a las iniciativas de los competidores más modernos, sino por su incapacidad de adaptarse a las nuevas demandas de los consumidores globales, que no solo pedirían una evolución en la forma de comprar, sino también en todo lo referente a la innovación.

La falta de innovación y sus consecuencias

Este último aspecto ha sido el tema de investigación de cientos de especialistas desde hace un par de años, ya que cada vez es más común ver "dinosaurios" que no son capaces de brindar valor adicional a la nueva clientela. Aunque alguno pueda ver esto como una estrategia, la realidad es que la mayoría ni siquiera sabe cómo responder ante la disrupción que se presenta cada año.

Si bien es cierto que la innovación se ha vuelto la “piedra en el zapato” de gran parte de las empresas más antiguas, la realidad es que canales como el retail han presentado nuevas alternativas de fácil adopción que tampoco estarían siendo tomadas en cuenta. Esto significa que la debacle no viene solo de parte del mercado, sino también de la incapacidad de gerenciar.

El caso más reciente: Sears

En el caso de Sears, la cadena de tiendas habría llevado cerca de 8 años sin registrar ganancias, y habría incrementado su deuda por encima de los 130 millones de dólares, algo que hacía insostenible el funcionamiento de la misma. Es por eso que desde hace varios años se vio el cierre de cientos de tiendas.

De acuerdo a distintos analistas, esto se dio simplemente porque la empresa nunca supo adaptarse al comercio digital, y se estancó en cuanto al surgimiento de innovaciones en el área. Varios competidores, como Macy’s y Nordstrom, lograron evolucionar a través de estrategias omnicanal, y la creación de pop-up stores.

Otras empresas que han seguido esta tendencia

Tal vez el caso de mayor relevancia previo a Sears fue el de la empresa Toys “R” Us, que a finales del año pasado se declaraba en bancarrota y cerraba más de 1.000 tiendas a nivel mundial, lo que según expertos se habría dado por un "atraso de casi 10 años" en cuanto a su estrategia de ventas por internet.

Del mismo modo, en los últimos años hemos visto la caída de gigantes como Blockbuster, que fue incapaz de adaptarse a los servicios de streaming de contenidos audiovisuales; e incluso Kodak, empresa que alguna vez fue pionera en el mercado de la fotografía, pero que tuvo problemas para evolucionar hacia la tecnología digital.