De la devaluación del bolívar, a la devaluación del dólar

En los últimos años, con un control cambiario cada vez más apretado, la caída en la producción del petróleo, y una debacle generalizada en la economía nacional, la moneda estadounidense comenzó a ganar un valor insospechado por encima del bolívar (hasta hace menos de 10 años estaba casi a la par).

No se trata de una revalorización del dólar a nivel internacional, sino de una fuerte devaluación de la moneda venezolana, que algunos expertos calculan habría perdido entre el 85 y 98% de su valor. De esta manera, acumular dólares se convirtió en la meta de la mayoría de la población, no solo para protegerse de la inflación, sino también para tener ahorros en caso de abandonar el país.

Cómo la hiperinflación cambió todo

Sin embargo, esto comenzó a cambiar cuando llegó la hiperinflación a la economía venezolana. Si bien inicialmente parecía que el dólar se mantenía a la par de este veloz incremento de precios, con muchos especulando que la moneda norteamericana era la causante de la debacle, con el pasar de los meses comenzaron a desligarse.

Eso pudo verse con las principales cotizadoras de la moneda, que durante el mes de marzo se mantuvieron completamente estáticas. Por su parte, la economía nacional continuaba su proceso de caída, y el cambio de dólares, que hasta ahora había sido una manera efectiva para subsistir en el país, comenzaba a perder su atractivo.

Al comenzar a volverse un problema para estas personas, ya que los dólares que generaban no eran suficientes para cubrir sus necesidades dentro del territorio nacional, comenzaron a posicionarse decenas de nuevas plataformas cotizadoras y el valor de la moneda despegó nuevamente. En su mayoría estos eran servicios de compra y venta de dólares en los que eran los mismos usuarios los que tranzaban el precio.

Todo parecía indicar que la tendencia alcista había llegado para quedarse, pero a mediados del mes de abril el precio del dólar, ahora cotizado por un gran grupo de plataformas, volvió a estancarse. Mientras tanto, la hiperinflación seguía haciendo su "trabajo", y el dólar comenzaba a perder su atractivo nuevamente.

Vivir de dólares pierde su viabilidad

Durante este par de semanas en las que el valor del dólar apenas ha variado, el aumento de los precios en Venezuela se ha mantenido, e incluso podría haber incrementado su velocidad. De acuerdo a la Comisión de Finanzas de la Asamblea Nacional (AN), la inflación del mes de abril se ubicó por encima del 80%, y la acumulada con respecto a diciembre es de 897,2%.

Es importante recalcar que con la devaluación del dólar no nos referimos a una caída en su valor en los mercados internacionales, sino que la relevancia que este tiene para el venezolano. Es importante conocer esto ya que hace que la competitividad que tenían los profesionales venezolanos en el exterior, que podían subsistir cobrando muy por debajo de la media internacional, está comenzando a disiparse.

Actualmente estos profesionales que trabajan con empresas extranjeras se están viendo obligados a incrementar sus tarifas, y aquellas personas que viven de las remesas que envían familiares desde el exterior también estarían viendo como las mismas no son suficientes para mantener su estilo de vida.