¿La dolarización podría ser una alternativa para impulsar la inversión?

En tiempos de recesión, la dolarización de la economía venezolana podría ser una alternativa para estimular la inversión productiva del país, permitiendo a los empresarios impulsar sus negocios de una manera más segura y rentable. A pesar de que entre los economistas hay opiniones encontradas de su aplicación, hay países latinoamericanos como Ecuador y Panamá que han visto resultados favorables en corto plazo.

El economista Steve Hanke, profesor de la Universidad Johns Hopkins y defensor de la dolarización, llegó a afirmar que los países formalmente dolarizados producen tasas de inflación más bajas y tasas de crecimiento económico más altas, y más estables, que los países cuyos bancos centrales emiten divisas nacionales.

¿Una forma de facilitar el financiamiento?

De este modo aseguran que la dolarización permitiría a los empresarios tener acceso a fuentes de financiamiento de largo plazo y bajo costo, minimizar el riesgo de perder la competitividad derivada de los movimientos de la tasa de cambio y reducir los riesgos para el inversionista extranjero.

Gracias al acceso a fuentes de financiamiento y bajo costo, el empresario podría tener la oportunidad de invertir a largo plazo y, por ende, tener más rentabilidad, porque este tipo de economía permite que las tasas de financiamiento sean más razonables y sin ningún tipo de riesgo cambiario. Los estudios de los mercados de capitales indican que los fondos de largo plazo y bajas tasas de interés solo se dan en monedas duras como el euro o el dólar.

¿Un incentivo para la inversión?

Otras de las supuestas ventajas del modelo monetario de dolarización es que reduciría la volatilidad de los ingresos y la incertidumbre a la hora de emprender un negocio, sobre todo para los inversionistas extranjeros que evalúan sus resultados en base a sus utilidades. Cuanto mayor es la volatilidad de la moneda a la que está expuesta la economía, mayor es el riesgo.

La dolarización del mismo modo suprime la expectativa sobre el riesgo devaluatorio atrayendo capitales extranjeros y logrando así un crecimiento. En el mundo hay inversionistas de todos tipos que mueven su capital de un país a otro, buscando la máxima rentabilidad. Los billetes que ingresan con estas inversiones es una forma de inyectar dinero en el país y hace que la economía crezca y se fortalezca.

Cuando se dinamiza la economía, el dinero puede entrar como: acciones o bonos de empresas que sirven de financiamiento directo para la construcción o renovación de activos; préstamos a bancos; e inversión directa.

El esquema monetario de dolarización también podría crear ventajas significativas tanto para el inversionista nacional como el extranjero, y una oportunidad para recuperar el aparato productivo y la adquisición de diferentes bienes de consumo. Entre sus mejorías, están la confianza, estabilidad económica, baja inflación e intereses, bajos costos de transacciones y además disciplina fiscal.

Para el consumidor traería el beneficio de bajas tasas de interés. Al confrontar formalmente la moneda local con el dólar, las tasas de interés tienden a reflejar el mercado internacional, lo que les permitiría adquirir bienes a un precio razonable. Lo que se traduce en mayor disponibilidad de ingresos para otros consumos o en compras variadas de acuerdo a sus necesidades. Esta reducción incentiva la industria de la construcción, el mercado de carros, la adquisición de bienes más duraderos y de consumo, así como el dinamismo de la economía.