5 frases para llamar al éxito

Los pesimistas pierden dos veces. Pierden en su inexorable falla y pierden en esa sensación de derrotismo perenne. Los emprendedores no pueden ser pesimistas. Emprendedor y pesimista deben ser antónimos. No se trata de caer en el optimismo idiota, sino de tener una actitud que permita avanzar hacia el logro de las metas del negocio.

Las dificultades no son mala suerte, son variables de la vida misma. I no se afrontan con actitud de emprendedor el negocio está perdido, tanto la inversión en capital como, lo más importante, en tiempo.

Por esa razón hay que mantener firme la actitud. Aunque el barco se tambalee en la tormenta, siempre con la vista fija en los objetivos. Para lograr eso siempre es bueno tener claras frases que personas exitosas tienen tatuadas en sus pensamientos. A continuación una lista de estas afirmaciones recopilada por INC:

1.- Si lo hago de una sola manera, siempre seré el último. Es tan sencillo como que si quieres resultados diferentes debes realizar acciones diferentes. Quien no se adapta pierde. Solo hay que observar a los seres que hacen vida en el planeta: ¿no son el resultado de años de evolución y cambios necesarios?

2.- No debo comparar la adquisición con la satisfacción. Ese placer efímero que da comprar y adquirir artículos materiales nunca es igual que la satisfacción. Hay que tener claro que la real satisfacción viene de hacer y no tener, pues al final el que va teniendo siempre va a querer más y más.

3.- Que se vea bien no significa un logro en sí. E hecho de que te veas mejor que alguien que ha errado no significa que hayas logrado algo. Los logros reales vienen por el mérito propio, no a partir de los problemas o dificultades que tengan los otros.

4.- No dejaré que el miedo a la crítica me detenga. Intenta algo diferente. Intenta hacer algo que los otros no hayan hecho. No te paralices por el miedo al qué dirán. Jamás una persona podrá tener contentos o satisfechos a todos los que le rodean. ¿Cuál es la píldora? Ser tú mismo en la vida y en los negocios.

5.- Hay que saber esperar. Todo a su momento. La oportunidad es eso, una oportunidad en un momento específico. Ni que llores o patalees, si ese momento no es el adecuado no es una oportunidad, será un fracaso. Hay que saber medir lo que llaman en pelota el timing, ese instante justo para hacer las cosas. Sin dormirse, pero sin apresurarse.