Billeteras digitales en Venezuela, ¿una tecnología realmente útil?
- Escrito por El Emprendedor
- Publicado en Dinero
La escasez del dinero en efectivo ha hecho que los monederos virtuales proliferen en el país, sin embargo, hay factores que impiden su crecimiento
La crisis económica que azota al país ha hecho que sus ciudadanos tengan que buscar múltiples alternativas para generar mayores ingresos y tener cierta calidad de vida. La devaluación del bolívar implica que los ahorros en moneda local sean casi inexistentes, debiendo acudir a nuevas opciones para utilizar el dinero en divisas.
Las nuevas tecnologías han hecho que el dinero físico esté en desuso si se compara con las transacciones Online a excepción de la divisa, debido a la devaluación de la moneda que ha tenido el país. Por eso se ha hecho indispensable contar con nuevos servicios que permitan hacer transacciones rápidamente de forma segura.
Las billeteras digitales comenzaron a llegar a Venezuela en el año 2016 como una forma de agilizar la compra venta de bienes y servicios sin utilizar el efectivo, algo que había comenzado a escasear. Actualmente ofrecen alternativas para recibir pagos y adquirir divisas o criptomonedas que pueden ser utilizados incluso como inversión o herramienta de protección.
¿Qué son las billeteras digitales?
Una billetera digital, también denominada wallet, es una plataforma que permite almacenar dinero virtual que se ha adquirido en algún sistema de pago, permitiendo (en algunos casos) convertirlo a otra moneda o activo intangible.
Debido a la emigración, que según cifras oficiales supera la cantidad de 3 millones de personas, el uso de las wallets ha aumentado drásticamente desde el 2015, cuando los ciudadanos comenzaron a pensar seriamente en la opción de irse a otra nación.
El control de cambio que existía en ese entonces impedía recibir pagos en monedas diferentes al bolívar, así que se convirtió en una necesidad real que varios innovadores decidieron resolver. Actualmente hay varias empresas bien posicionadas en América Latina que ofrecen servicios relacionados al sector.
¿Qué problemas le resuelven al venezolano?
El principal problema que resuelve una wallet es la de almacenar dinero que pueda ser utilizado tanto para comprar productos digitales, físicos o para intercambiarla por alguna otra moneda de mayor valor que no se devalúe tan rápido.
Es por eso que en la actualidad hay miles de comercios de que aceptan pago por esta vía. Estos negocios comercializan desde productos de primera necesidad, hasta licor, tecnología o cualquier otro servicio.
El método de pago es a través de algún dispositivo inteligente que tenga la app registrada en sus archivos. El usuario debe tener dinero disponible en su monedero para poder intercambiarlo por el producto que piense adquirir.
¿Han calado en el mercado?
Una vez que se anunció la llegada de varias plataformas hace algunos años, se generó un gran revuelo en los consumidores, ya que para ese entonces la escasez de efectivo estaba en su punto más álgido y las transacciones se estaban complicando, especialmente cuando se trataba de montos elevados.
A pesar de que las criptomonedas y procesadores de pago son una tendencia en crecimiento, el mercado venezolano aún no las ha adoptado como parte del día a día, especialmente por las limitaciones en la penetración de la tecnología móvil.
El reto principal que tienen los clientes va relacionado directamente con la calidad de la conexión a Internet, algo imprescindible para realizar pagos de este tipo. La inseguridad también es un tema a tomar en consideración, debido a que muchas personas pueden no contar con un dispositivo inteligente por miedo al crimen.
Del mismo modo, no todos tienen acceso a dispositivos inteligentes de alta capacidad que puedan soportar las características de las plataformas, que sumándolo al desconocimiento del uso y utilidad de estas tecnologías da como resultado que aún haya un vacío general en el mercado.
¿Qué pasará en los próximos meses con las wallets en Venezuela?
La pandemia ha cambiado por completo las reglas del juego, especialmente en el ámbito económico. Las proyecciones que se tenían para este año se han modificado completamente. Las tendencias digitales como el comercio electrónico, delivery, economía compartida, aplicaciones, billeteras virtuales y criptomonedas se estarían posicionando en las masas como nunca antes.
En este sentido se puede presagiar un crecimiento sostenido de plataformas que permitan almacenar y enviar dinero a otros establecimientos físicos o digitales. Sin embargo, en Venezuela se deben superar los obstáculos mencionados para que este tipo de servicios pueda masificarse con mayor velocidad.
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