Las criptomonedas comienzan a agilizar el pago de productos de difícil acceso

Desde hace poco más de un año que, gracias a la tecnología que utilizan de sustento, las criptomonedas han comenzado a posicionarse como uno de los métodos más efectivos para ahorrar e invertir. Estas no solo se han transformado en una forma altamente novedosa de cotizar y pagar productos, sino que también se ha vuelto una verdadera revolución financiera.

Eso se estaría demostrando recientemente con el lanzamiento de SKB (Sakura Bloom), un token desarrollado por la empresa japonesa NEGTEC, que tendría el objetivo de lograr que la medicina regenerativa se convierta en un servicio accesible para cualquier persona del mundo, sin importar su ubicación.

El caso del SKB

Este token puede ser generado de distintas maneras, ya sea mediante una inversión directa, a través de la minería, el intercambio, e incluso al participar en eventos de la empresa. Con esta moneda, el cliente puede tener acceso a servicios de medicina regenerativa mediante la plataforma conocida como CliniMACS.

De esta manera, cualquier poseedor de la criptomoneda puede tener acceso a uno de los servicios más innovadores en el mundo médico, pero no solo eso, sino que la misma puede ser intercambiada por otros activos digitales, e incluso ser comprada de forma sencilla a través de internet, lo que facilita el acceso al tratamiento.

Si bien es cierto que no en todos los países podrá utilizarse una tecnología médica como la que está proponiendo la empresa, la realidad es que el sistema que están utilizando para potenciar dichos tratamientos es lo que generaría expectativas para masificar el uso de las criptomonedas como una herramienta para incrementar la accesibilidad a bienes y servicios.

Oportunidades de uso

Este token demuestra que gracias a las criptomonedas es posible, no solo invertir en el desarrollo de miles de iniciativas innovadora, sino también tener acceso a productos que hasta ahora estaban bloqueados para muchos a causa de limitaciones como la ubicación geográfica, o la debilidad de la moneda local.

Debido a que las mismas no solo pueden ser compradas, sino que en algunos casos pueden generarse a través de la minería, u obtenerse mediante el Exchange (intercambio directo), cada vez es más sencillo recibir productos innovadores utilizándolas como medio de pago. El caso del SKB es solo uno de muchos.

De esta manera, cualquier persona que tenga acceso a un método de compra de criptomonedas, también tiene el potencial de acceder a bienes y servicios creados por empresas que no solo se encuentran en espacios completamente alejados, sino que manejan monedas locales ajenas a las del comprador.

Aunque todavía es pronto para asegurar que esta metodología se posicionará como una de las más usadas en el mundo (principalmente teniendo en cuenta las polémicas que suelen surgir alrededor del tema), la realidad es que la Blockchain y las criptomonedas realmente parecen estar revolucionando el comercio a nivel mundial.