Los modelos con los que los desarrolladores venezolanos pueden monetizar sus app

Como lo hemos reseñado en el pasado, cada vez más desarrolladores venezolanos han comenzado a crear sus propias aplicaciones con el objetivo de darle un giro a los servicios, la educación, e incluso el entretenimiento en nuestro país. No se trata de una especulación, sino de algo que incluso ha sido confirmado por entes especializados.

Este crecimiento en la iniciativa tecnológica nacional se ha hecho palpable en el último año gracias al desarrollo de varias app móviles como pueden serlo Agrauco (especializada en el desarrollo agrícola), Nekso (para los servicios de taxi bajo demanda), Alcancía (para organización personal), entre muchas otras.

Los modelos de negocios

Es por eso que podemos ver que no solo se trata de una idea para ayudar a Venezuela a adaptarse a los estándares tecnológicos internacionales, sino que además son una forma interesante y efectiva de generar ingresos, no solo en bolívares, sino también en divisas. Es por eso que hemos investigado cuáles son los modelos de ingresos más atractivos para monetizar una app.

1. Compra dentro de la app

Se trata de un modelo popular, ya que le da la posibilidad al consumidor de ser quien lleve las riendas del proceso de compra. En este se descarga una app, y más adelante se van haciendo pequeñas inversiones de acuerdo a las funcionalidades bloqueadas que tenga la misma.

En este modelo de ingresos lo ideal es dividir la app por secciones y funciones, por lo que un desarrollador podrá colocar una app base (gratuita) en el mercado digital, y cobrar por distintos beneficios que se irán añadiendo de acuerdo a las necesidades, o las posibilidades económicas, del consumidor.

2. Publicidad dentro de la app

Tal vez uno de los más utilizados por los pequeños desarrolladores, en este modelo el desarrollador coloca una app completamente gratuita en la tienda virtual, y genera ingresos a través de la venta de espacios publicitarios dentro de la misma. Dependiendo del acuerdo, puede que estas puedan saltarse, que aparezcan con mayor o menor frecuencia, entre otros.

Se trata de una forma ideal de generar ingresos si se tiene una app con posibilidades de volverse masiva, ya que del mismo modo que ocurriría con cualquier otro espacio publicitario, los ingresos que se generen dependerán de la cantidad de personas que la utilicen durante un determinado periodo de tiempo.

3. Modelo bajo suscripción

Tal vez uno de los modelos de ingresos menos utilizados, ya que es poco probable que un grupo de consumidores tenga los medios para pagar un servicio por suscripción, o incluso el deseo de hacerlo. En este, los desarrolladores tienen una tarifa fija que se va descontando del bolsillo de los clientes cada cierto tiempo.

Se trata de un modelo complejo, ya que las posibilidades de que una persona pague por suscripción dependerán de la calidad del producto que se le ofrezca a los consumidores, por lo que es recomendable que se brinde contenido nuevo e interesante de forma periódica, ya sean mejoras de funcionamiento, o de entretenimiento.

4. Compra directa

Se trata de uno de los modelos más comunes, pero también de los más complicados de aplicar, ya que es simplemente cobrar por la app directamente en la tienda virtual de preferencia. Dependiendo de la utilidad de la misma, y de la importancia de los desarrolladores, el precio puede ser de varios dólares.

El problema con este modelo de ingresos es que los desarrolladores de la app no solo tienen que tener una idea muy clara sobre cómo le estarán generando valor al consumidor, sino que tendrán que definir un precio ideal en base al público al que se están dirigiendo, y realizar varias pruebas para lograr posicionarla.

Aunque el desarrollo de una estrategia de monetización de aplicaciones está directamente enlazado con la creación de la misma, la realidad es que conocer cuáles son los modelos de negocios más utilizados por desarrolladores de todo el mundo puede funcionar como un punto de inicio para cualquiera que quiera generar ingresos en este mercado.