La idea para incrementar la rentabilidad de chocolate venezolano

A lo largo de los años, Venezuela ha sido conocida por ser un país exportador de petróleo. Gracias a los más de 100 años de explotación del recurso natural, muchos otros productos autóctonos del país han tomado un lugar secundario como generadores de ingresos. Uno de estos es el chocolate.

Durante varias décadas, el chocolate venezolano ha sido conocido en todo el mundo por la alta calidad de los insumos involucrados, y por los métodos de procesamiento únicos en nuestro país. Esto ha llevado a que se catalogue a nuestro chocolate como "el mejor del mundo", por encima de otros grandes productores.

No cumple las expectativas

Sin embargo, a pesar de esto, se trata de un mercado que no genera grandes ganancias a la nación, ya que no solo se ha mantenido en cantidades de producción muy bajas, sino que empeora cada día, con agricultores y productores asegurando que los procesos se están empezando a perder.

Según un reportaje realizado por Fox News a mediados de 2015, Venezuela apenas exporta 8.000 toneladas de cacao al año (casi lo mismo que el ron). Varios productores aseguran que la revocación de licencias, y complicaciones en las exportaciones hacen que en muchos casos se pierda el producto

La solución al problema

A pesar de tratarse de un problema institucional que se ha presentado en las últimas décadas, donde no se trató de hacer que este producto fuera más relevante en la economía nacional, también puede verse un problema cultural que se ha arrastrado por muchos años. Tanto productores, como comercializadores y consumidores, no han sabido darle el lugar que se merece.

Aunque parezca poco común que un país desaproveche uno de los productos más preciados del mundo, en realidad ocurre más de lo que se piensa. Esta situación se da también en Indonesia, donde siempre se le ha dado preeminencia a otro tipo de alimentos y postres, y que ha llevado a que el mercado chocolatero se atrase cada vez más, y genere menos beneficios.

Como mencionamos recientemente, es por eso que en el país se creó una escuela del chocolate, una institución especializada en mostrarle a la población las bondades de este alimento, pero no solo como producto de consumo, sino como fuente de ingresos personales y para el desarrollo de la nación.

Parece que esta idea puede ser ideal para nuestro país, ya que en los últimos años se han creado distintas iniciativas para la promoción de este mercado, tanto públicas como privadas, pero ninguna ha tenido un impacto real en el desarrollo del mismo. Esto parece deberse principalmente a que no se centran en partes importantes como la industrialización, comercialización, y distribución.

Al ver todas las iniciativas que se desarrollan en el país siempre puede notarse que solo buscan enfocarse en promocionarse a sí mismas, en vez de lleva a cabo programas especializados en las diferentes formas con las que capitalizar este mercado de forma seria. Es por eso que la creación de una escuela del chocolate como la de Indonesia, que sí toma en cuenta estos aspectos, puede ser muy positivo.

Aunque todavía no exista una institución de esta naturaleza, se trata de algo prometedor, ya que el chocolate a nivel mundial se vuelve cada vez más valioso, y con un producto de tan alta calidad como el que tiene Venezuela, se podría estar creando una fuente de ingresos nunca antes vista.