Lo que hace el gobierno de EE.UU. para proteger a sus empresas del dumping internacional

Estados Unidos siempre ha sido conocido por promover medidas enfocadas en el libre comercio y la eliminación de las políticas proteccionistas. Se trata de un fenómeno que han fomentado con la intención de lograr que sus empresas puedan tener el mayor alcance posible, y puedan generar ingresos para toda la nación a través de exportaciones.

A pesar de esta mentalidad, se trata también de una economía que sabe cuándo se le debe poner un parado a este tipo de negociaciones. La "gota que rebasa el vaso" suele ser cuándo un producto importado comienza a generar una competencia desleal, y amenaza con dañar a las industrias nacionales.

El caso más reciente de una situación de esta naturaleza lo vivieron esta semana con uno de sus mayores aliados económicos: Argentina. El impase nació luego de que las importaciones de biodiésel argentino fueran registradas con un precio demasiado bajo, haciendo que se les acuse de dumping.

Según la Real Academia Española (RAE), se conoce como dumping a la "práctica comercial de vender a precios inferiores al costo, para adueñarse del mercado, con grave perjuicio de este". Aunque no es considerado un delito, o ninguna forma de procedimiento ilegal, si es mal visto por los representantes del comercio mundial, quienes suelen tomar medidas para eliminarlo.

En este caso, las empresas exportadoras de biodiésel argentino estaban colocando un precio demasiado económico que, aunque no se sabe si está valorado de forma ficticia, sí fue considerado como dumping por la Comisión de Comercio Internacional norteamericana (Usitc).

¿Cómo respondió el gobierno de EE.UU.? Colocando aranceles excesivamente altos, de entre 54,36% y 70,05%, lo que significa que el producto tendrá un precio final que casi duplica el original, disminuyendo su competitividad en el territorio norteamericano de forma considerable.

“La administración de Trump está comprometida con el comercio libre y justo, por lo que defenderá a los trabajadores estadounidenses de cualquier práctica comercial injusta (...) Estamos agradecidos con el gobierno argentino por su búsqueda proactiva de soluciones, por lo que nos mantendremos optimistas (...)”, aseguró Wilbur Ross, Secretario de Comercio de EE.UU.

Sin embargo, el gobierno argentino parece no mostrarse de acuerdo con esta medida, ni con la búsqueda de una renegociación de los precios, ya que están estudiando la posibilidad de recurrir a Organización Mundial de Comercio (OMC), para denunciar de violatoria a la medida impuesta por el gobierno norteamericano.

Es importante recordar que la mayoría de las grandes economías suele tener distintas leyes con las que protegen a sus empleados y empresas de las inversiones extranjeras y las importaciones, cosa que no suele suceder en los países en desarrollo, y que debería ser tomado en cuenta con mayor seriedad para asegurar su crecimiento estable.