Mercado lácteo venezolano necesita mentes innovadoras

Recientemente reseñábamos la polémica situación que atraviesa el mercado de los lácteos en nuestro país. Esto se debe a que el presidente de la Cámara Venezolana de la Industria Láctea (Cavilac), Roger Figueroa, aseguró que en Venezuela no hay leche pasteurizada por falta de envases plásticos.

Según lo declarado por el titular de la Cámara, gran parte de la escasez se debe a que la empresa Venenvases no está operativa actualmente. Esta era la responsable de proveer cerca del 70% de los contenedores que utilizan los productores para envasar sus productos.

A pesar de que ya reflexionamos sobre esta situación, y entendemos que hay una serie de factores adicionales que influyen en la escasez del producto, podemos inferir que esta declaración simplemente demuestra que en el empresariado local hay una falta de innovación bastante alta.

Según la prensa, esta empresa de envases habría cerrado en 2015, lo que hace complejo creer que en realidad han pasado casi 3 años sin que los productores busquen una alternativa a la situación, aunque sea una de contingencia. Basándonos en estos hechos, podemos inferir que lo que realmente requiere el sector es una inyección de innovación.

El papel del innovador

Claramente no es sencillo trabajar en un ambiente rodeado de controles como lo es el de los mercados de consumo básico en nuestro país, sin embargo, eso no puede ser una excusa para la escasez, ya que no solo se está hablando de una industria y cientos de productores, sino de una población entera que se está viendo fuertemente afectada.

Es aquí donde debe entrar el innovador (o incluso inversionista) venezolano para desarrollar soluciones prácticas y económicas. Esto no solo se traduce en el aumento de la calidad de vida de la población venezolana, sino también en una mina de oportunidades de negocios que no están siendo explotadas.

Quedándose en el tema del empaquetado, podemos ver que la industria estaría paralizada, en parte, por falta de envases plásticos, ¿pero qué pasa con otro tipo de recipientes? Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el mercado lácteo no solo cuenta con este tipo de recipientes.

En realidad, el envasado plástico se ha vuelto una preocupación para gran parte del mundo debido a sus cualidades contaminantes. La organización explica que otras alternativas a estos incluyen el vidrio, las latas, el cartón, y los sachet. Todos estos productos se han usado en el pasado en nuestro país, y se utilizan actualmente en todo el mundo, lo que hace curioso que no sean más comunes en Venezuela, sobre todo en una situación de contingencia como la actual.

No solo esto, de no existir suficiente dinero como para envasar, la FAO también explica que un método completamente valido para la distribución de leche líquida son las máquinas dispensadoras. Para esto, los productores solo deben encargarse de hacer el producto, mientras que un distribuidor es el que lo lleva y lo coloca en las máquinas, como se ha realizado ya en otros mercados.

Finalmente, también existe la opción de conectar a productores y consumidores de forma directa. Similar a la alternativa anterior, el productos no debe hacer más nada que recolectar la leche, y vendérsela al consumidor final, quien decidirá si utilizar servicios de delivery para recoger su producto, o si es mejor otro método.

Como presentamos aquí, parece imposible que realmente una industria que alimenta a cerca de 30 millones de personas se vea casi paralizada por variables como la falta de empaques. Gracias a la innovación que publicamos diariamente, podemos ver que existen cientos de alternativas para resolver los problemas.