¿Las competencias de emprendimiento están cambiando el concepto de Startup?

Recientemente, a través de diferentes medios de prensa nacional, se difundió la convocatoria realizada por GrupoCASA para que las Startups más innovadoras de Latinoamérica se sumen al LatAm Edge Awards, un evento que busca ayudar a estas empresas a tener una oportunidad de expandirse en el Reino Unido.

LatAm Edge Awards es un evento creado por GrupoCASA en 2016 con la intención de ayudar a las Startups latinoamericanas a expandirse en territorio del Reino Unido. Se trata de un evento que premia a la Startup más innovadora con una serie de beneficios valuados en casi 120 mil dólares.

A pesar de que se trata de un premio sustancial que brinda asesoría legal y empresarial para que las empresas puedan probar la vida en un mercado tan moderno como el del Reino Unido, el mismo genera una serie de cuestiones debido a las mismas condiciones del evento, siendo la más importante:

• ¿Las competencias de emprendimiento están cambiando el concepto de Startup?

Las empresas que quieran registrarse deben operar en sectores como ciudades inteligentes, salud, energía, Fintech, Bigdata, medios, juegos, entre otros. Sin embargo, la duda surge porque cualquier empresa que desee inscribirse debe ser capaz de generar como mínimo 1 millón de dólares en ingresos, o invertir esta cantidad de dinero de forma anual.

Si bien es cierto que el premio antes mencionado incluye una serie de beneficios que podrían ser incalculables, la necesidad de que la Startup sea capaz de generar una suma de dinero tan alta anualmente hace cuestionarse sobre lo que se considera realmente una Startup, sobre todo en América Latina.

Globalmente existen muchos profesionales en el área empresarial que definen a las Startups como pequeños proyectos en periodo de desarrollo, y es por eso que se hace difícil asociar estos conceptos con una empresa capaz de generar al menos 1 millón de dólares anuales.

Tim Westergren, creador del servicio de streaming musical (y una de las Startups más importantes del 2000) Pandora, asegura por su parte que una empresa dejará de ser emergente cuando tenga una cultura y una serie de procedimientos de trabajo que las haga maduras. Siempre que una empresa cumpla con estas características no formará parte de las Startup.

Este concepto se pone a prueba en el caso de la única empresa que ha ganado el concurso hasta ahora, recordando que el mismo solo ha tenido una edición, fue la chilena TOC Biometrics, encargada del desarrollo de software de seguridad nacida en 2010 y que tiene presencia en países que incluyen Alemania, Austria y Suiza.

A través de la información publicada por los organizadores del evento, se puede ver que la información que circula a través de los medios de comunicación no es lo suficientemente clara para entender a que es a lo que llaman una Startups, y mucho menos cuál es el verdadero premio de la competencia.

Es importante recalcar que además de que el premio equivale a 120 mil dólares en asesorías y espacio de trabajo en el Reino Unido, este no incluye la gestión de documentos, ni los gastos personales, por lo que la empresa no solo debe ser capaz de mantenerse en el país donde opera, sino a todos aquellos que vayan como representantes a Europa durante un año.

"Creamos el premio con base en nuestra experiencia de muchos años atendiendo Startups, scaleups y multinacionales que llegan de América Latina. Aprendimos que cuando una empresa va a empezar una nueva operación, se necesita al menos un año de experiencia en el lugar elegido”, es la justificación de Sandra Sinicco, CEO del Grupo CASA, sobre la naturaleza del premio.

Según el experto en emprendimiento y autor de libros sobre estrategia empresarial, Neal Cabage, las principales necesidades de una Startup incluyen captación de clientes, mejoramiento del producto, estudio de la competencia, financiamiento y desarrollo del equipo con el que se trabajará.

Con lo antes expuesto, todo parece indicar que estos premios no estarían obedeciendo a las necesidades de una Startup, sino a las de una pequeña empresa ya constituida, ya que no favorecen a la obtención de fondos o de mejoramiento del producto, sino a la internacionalización profesional del negocio.