Cómo el internet haría más competitivo el servicio de peluquería en Venezuela

En momentos de crisis económicas, algunos de los primeros productos o servicios que las personas dejan de consumir son aquellos que no tienen una importancia demasiado alta en su vida. Estos pueden incluir lujos como servicios de limpieza, transporte privado o belleza. La peluquería, parte del mercado de la belleza, no desaparece pero sí se ve obligada a mutar según profesionales en el área.

En el caso de esto último, Venezuela ha experimentado una fuerte caída, ya que según una nota de prensa enviada por la Asociación de Trabajadores, Emprendedores  y Microempresarios (Atraem), a raíz de un aumento escalado de casi 300% en los precios de los servicios de peluquería, estos establecimientos vieron una caída de al menos 60% en el último año.

De esta manera, es posible ver como cada vez se vuelve menos rentable para estos establecimientos quedarse sentados mientras esperan que los clientes tengan la iniciativa de realizar algún tratamiento estético, por lo que la solución a este problema podría estar en el uso del internet.

Así lo estaría demostrando una nueva empresa estadounidense llamada Shortcut, que a través del modelo de negocios "On Demand", está revolucionando la forma en la que se ve el servicio de peluquería de forma tradicional, añadiendo un toque de tecnología en este mercado, y siendo más competitivo que el resto.

"Nuestra misión es crear un Marketplace bajo demanda para darle a los barberos la libertad de hacer lo que aman y de cobrar lo que se merece, asegura el cofundador de la compañía, Will Newton. El afirma que se trata de una forma de innovar en este mercado a través de la eliminación de las altas comisiones y limitaciones que imponen las peluquerías tradicionales.

¿Cómo lo hacen? como se mencionó antes, a través del modelo bajo demanda, donde las personas no son las que se transportan hasta un establecimiento de belleza, sino que son los estilistas y peluqueros los que viajan hasta el lugar donde se encuentre su cliente, ya sea una casa propia, un espacio público, o incluso un espacio de trabajo.

En Shortcut, cualquier estilista profesional, con registro legal, puede registrarse en la plataforma y ser contactado por personas con necesidades diversas en esta área. Una vez se ha realizado el contacto, el usuario da la dirección de encuentro, y el estilista va a hacer su trabajo. Finalmente el pago se realiza a través de un dispositivo móvil.

Si bien al tratarse de un sistema que incluye una serie de beneficios para el estilista, lo que hace que el servicio sea mucho más costoso que un corte tradicional, esta modalidad lo hace más competitivo ante las peluquerías tradicionales, ya que no se basa en esperar a que lleguen los clientes, sino que constantemente muestra su disposición hacia encontrarlos, incluso en horarios no tradicionales.

Es por eso que para mantener precios competitivos, pero a la vez proveer un servicio único, Shortcut ofrece ofertas especiales no solo para miembros de la plataforma, sino para realizar sesiones donde más de una persona utilice el servicio. Es decir, la empresa cobra menos mientras más consumidores adquieran el servicio.

De esta manera, la empresa se enfoca en una serie de eventos especiales como lo son las bodas, mantenimiento para eventos especiales (ya sea detrás de escenas o similares), e incluso como parte de beneficios empresariales, ofreciendo sesiones de peluquería a empleados.

Se trata de un uso innovador de la tecnología para impulsar un negocio tradicional a la era digital, ayudando a que el mismo no solo llegue a públicos a los que antes no llegaba, sino que incentiva al desarrollo de estrategias creativas que pueden aplicarse en países donde estas ideas no están llegando de manera orgánica.