¿Qué alternativas existen para que los venezolanos financien sus proyectos?

Aunque no sea fácil de creer, los últimos 10 años de Venezuela han tenido condiciones ideales para la creación de proyectos nacionales, a pesar de tratarse de un momento sumamente complicado para la economía, esto ha motivado a que los venezolanos ideen y comercien sus propios productos.

Esta misma situación que ha favorecido al emprendimiento, también ha degradado significativamente las formas de financiamiento que existen para estos proyectos. Algunas de las más populares que han disminuido su apoyo son las inversiones en la bolsa y los créditos bancarios.

De esta manera, iniciativas mundiales enfocadas en la globalización han comenzado a penetrar el mercado venezolano para lograr que estos creativos materialicen sus ideas sin necesidad de una estabilidad política, social o económica; y en efecto han dado frutos interesantes en los últimos años.

Entre las formas más populares se encuentran el factoraje financiero o el "Contract Financing", dos métodos que incluyen la intervención de empresas especializadas para la realización de documentos y descuentos que ayudan a las pequeñas empresas a obtener créditos.

Sin embargo, la forma más común de financiamiento alternativo, y la única de las mencionadas anteriormente que se ya se aplica en el país es el Crowdfunding o financiamiento colectivo, con la que las personas realizan campañas para obtener el apoyo financiero de posibles inversionistas a cambio de diferentes beneficios ligados al proyecto en cuestión.

Se trata de financiamiento para cualquier tipo de proyectos que obtienen fondos de decenas de miles de dólares para cimentar, desarrollar e incluso comercializar sus proyectos. Las principales plataformas de Crowdfunding en el mundo son IndieGoGo, Kickstarter y GoFundMe, donde confluyen financiamientos para bienes de primera necesidad, formas de entretenimiento, productos digitales.

En Venezuela han logrado materializarse una serie de proyectos a través de esta forma de financiamiento como lo es Epix, un emprendimiento artístico y social que logró recaudar más de 4 mil dólares para poder desarrollar su producto y promocionarlo a través de medios digitales.

Otro caso es el de la asociación Dar y Recibir, que a través del Crowdfunding han financiar cerca de 136 causas sociales, que se traducen en más de 30 millones de bolívares para ayudar a personas con problemas o necesidades de salud, a pagar sus medicamentos o tratamientos médicos.

Igual que estos existen cientos de proyectos que son realizados en el país y que utilizan esta modalidad de financiamiento. A pesar de que no todos logren cumplir su meta final, se trata de un método que puede ayudar a que más adelante los pequeños empresarios venezolanos puedan sortear las dificultades para materializar sus ideas.

Una de las condiciones más favorables para el acoplamiento de estas formas de financiamiento a la sociedad venezolana actual es la globalización. Esta es la forma en la que las economías de todo el mundo están interconectadas con la finalidad de unir mercados, culturas y sociedades.

Esta reforma política y social sería ideal para el crecimiento, en calidad y cantidad, de emprendedores en los países, ya que se trata de una forma de asegurar la competencia a través de cientos de empresas productoras en vez de favorecer en la creación de monopolios.