Samsung lanza equipo telefónico y corre para retirarlos del mercado

A principios de septiembre Samsung comenzaría a enfrentar una de las crisis más graves de su historia. Su nuevo Galaxy Note 7 habría sido lanzado al mercado con una falla que le costaría a la empresa una caída de 26 millardos de dólares en su valor de mercado.

El equipo lanzado a finales de agosto presenta una falla en su batería que hace que esta explote si llega a sobrecalentarse. En un periodo de alrededor de dos semanas se registraron múltiples casos de este problema, lo cual llevó a la empresa a retirar 2.5 millones de tabletas.

A pesar de que aparentemente no todos los equipos salieron defectuosos, la compañía se vio obligada también a pedirles a los compradores que se abstuvieran de utilizar el producto, y múltiples aerolíneas prohibieron cargar este tipo de dispositivos en sus aviones. 

Incluso existe la posibilidad de que la empresa empiece a bloquear de manera remota, a partir de finales de septiembre, los equipos que sigan siendo utilizados. La última medida que está aplicando Samsung para intentar recuperar su imagen es permitir a los usuarios cambiar su tableta defectuosa por una nueva, o incluso alguno de los otros equipos de la gama de productos que posee la compañía.

Todas estas medidas han causado que la empresa pierda alrededor de 26 millardos de dólares en su valor de mercado, lo cual la ha debilitado frente a competidores como Huawei o Xiaomi por primera vez en lo que va de año. A pesar de las medidas tomadas por la empresa para frenar su caída en la bolsa, apenas han podido aminorar la velocidad de la misma.