¿Qué significa la derogación de la Ley de Ilícitos cambiarios?

Este jueves, el vicepresidente para el Área Económica Tareck El Aissami, presentó ante la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) un plan para la derogación del Régimen de Ilícitos cambiarios, una ley profundamente ligada con el control de cambio en nuestro país, y el castigo por la compra y venta de dicha divisa en el territorio nacional.

Se trata de una propuesta de la que se venía hablando desde la semana pasada, cuando el presidente de la República anunció (en su alocución sobre las nuevas medidas económicas) que se estaba trabajando en una modificación de dicha ley, con el objetivo de incentivar las inversiones y el desarrollo productivo del país.

Derogación del Régimen de Ilícitos cambiarios

“Con este proyecto sentaremos las bases sólidas de respaldo y seguridad a todas las inversiones y operaciones en divisas convertibles para así superar y derrotar los marcadores criminales (paralelo). Este decreto facilita que cualquier persona haga operaciones bajo el amparo de nuestra Constitución sin que incurra en ningún delito”, explicó El Aissami durante la entrega del documento.

El mismo fue aceptado por la ANC, y luego de breves instantes fue aprobado por la misma, por lo que puede decirse en efecto la derogación ya se llevó a cabo. Durante la presentación del documento no se expresó cuáles serían los mecanismos para lograr los objetivos planteados, como por ejemplo, la devolución del poder adquisitivo, la estimulación de la producción nacional, y el funcionamiento de un nuevo sistema de comercio.

La derogatoria apunta directamente al artículo tres del Decreto con Rango, Valor y Fuerza de Ley del Régimen Cambiario y sus ilícitos y el artículo 138 del Decreto con Rango, Valor y Fuerza de Ley del Banco Central de Venezuela en lo que concierne exclusivamente al ilícito referido a la actividad de negociación y comercio de divisas en el país.

Esto quiere decir que, de llevarse a cabo con precisión esta derogación, los "actores económicos" tienen la posibilidad de acudir a las casas de cambio, autorizadas por el presidente de la República, para realzar operaciones cambiarias, todo esto "de manera transparente, legal y segura". Afirmó que esto brinda la oportunidad de generar nuevas fuentes de riquezas.

No es una liberación del dólar

Sin embargo, es necesario acotar que la derogación de esta ley no significa una eliminación o levantamiento del control que tiene el estado sobre el manejo de divisas en nuestro país, sino simplemente un canal con el que se estaría simplificando la compra y venta de dólares por parte de personas naturales. También es importante recordar que el anuncio de las casas de cambio se dio hace ya varios meses, y hasta ahora no han comenzado a funcionar.

Aunque el gobierno aún no ha explicado cuál será el nuevo mecanismo de control, gran parte de los economistas aseguran que lo más probable es que veamos el surgimiento de un sistema dual con una tasa de cambio preferencial y una paralela, similar a la que existió con el Recadi (implementado por Luis Herrera Campins) en la década de los 80 bajo el gobierno de Jaime Lusinchi.

Sin embargo, históricamente este ha sido un sistema repudiado por la opinión pública debido a los altos índices de corrupción que generó durante su funcionamiento, lo que llevó a que se desmantelara apenas 4 años después de su puesta en funcionamiento. Es por eso que la derogación del Régimen de Ilícitos cambiarios no estaría siendo visita como positiva por el momento.

Con esto en mente es claro que no queda otra opción más que esperar a que se continúen desenvolviendo los hechos. De cara a las próximas semanas se espera el anuncio de nuevas medidas en las que se explique en profundidad cómo es que funcionará este sistema, y más adelante es que podremos analizar sus resultados.