El IoT daría paso a los "productos como servicio" en Venezuela

Como lo informábamos hace varios meses, a pesar de que muchos piensen que el desarrollo tecnológico en Venezuela se ha visto estancado por la situación económica y política que vivimos, la realidad es que aún nos mantenemos creando e implementando algunas de las innovaciones más importantes a nivel mundial. Una de estas es el Internet de las Cosas (IoT por sus siglas en inglés).

¿Qué es el Internet de las Cosas?

El IoT, en palabras simples, no es más que la interconexión, a través de Internet, de una serie de productos. El mismo tiene el objetivo de llevar a cabo el monitoreo y la transmisión de información en tiempo real para optimizar su uso. Gracias a esto se está desarrollando una de las oportunidades de negocios más conversadas en la actualidad: los productos como servicio.

Este último es un modelo de negocio en el que una persona ya no necesita adquirir un producto de manera permanente, sino que puede "alquilarlo" a un proveedor del mismo. El IoT es vital para este proceso porque permite el monitoreo del producto con la finalidad de ofrecer distintos beneficios a los clientes.

Una nueva forma para capitalizarlo

Teniendo esto en cuenta estos conceptos, y cómo esta tecnología ha comenzado a ganar lugar en nuestro país, resulta importante conocer qué está desarrollándose en el planeta para lograr utilizar el Internet de las Cosas como una base sólida para lograr la implementación de este popular modelo de negocio.

Kyle Irby, de la empresa tecnológica PTC, aseguró en una reciente entrevista que lo más importante de esta tecnología, al momento de utilizar un producto como servicio, es el análisis predictivo del funcionamiento de lo que se ofrece, datos de desempeño en tiempo real, datos de uso, y otras tecnologías similares.

Aplicarlo en nuestro país

Eso se debe a que, como lo explicamos inicialmente, el monitoreo de los productos es vital para poder ofrecerlos como un servicio, no solo porque permite saber si el producto se está utilizando de forma responsable, sino también para poder asegurar su mantenimiento y un rendimiento sostenido ante la rotación de clientes.

Es por eso que para lograr instaurar este modelo de negocio, con el que los venezolanos podrían generar ingresos con prácticamente cualquier bien que posean, se necesitan tecnologías de este estilo para poder comenzar a permitir el uso de productos como servicios sin arriesgarse a un mal funcionamiento o incluso posibles daños causados por el cliente.

Aunque se trate de una forma de hacer negocios que hasta ahora no se ha posicionado en nuestro país, ya sea por falta de tecnología o desconocimiento de esta cultura, ver cómo está comienza a posicionarse a nivel internacional demuestra que, de cara a los próximos años, podrá comenzar a capitalizarse en nuestro país.