¿Qué significa para la economía la fuga de millonarios que presenta Venezuela?

Desde hace varios años que Venezuela ha atravesado uno de los periodos de crisis más agudos en la historia de la región, caracterizado no solo por una estable caída en el valor de la moneda nacional y el abastecimiento de productos de primera necesidad, sino también por una migración que oscilaría entre 1.5 y 3.3 millones de personas.

Si bien es cierto que al tomar en cuenta este fenómeno se habla principalmente de las clases sociales más afectadas por la situación, es decir, las que se encuentran en el espectro de los ingresos medios, la realidad es que según Global Wealth Migration Review (Reseña de la Migración de Riqueza Global), Venezuela tendría una de las mayores fugas de millonarios en el mundo.

Los datos del estudio

El estudio, elaborado por New World Wealth (consultora de mercado con sede en Johannesburgo, Sudáfrica), reveló que Venezuela se encontraría en la décima posición de los países con mayor fuga de millonarios en el planeta. Nuestro país sería el décimo en la lista con alrededor de 1.000 millonarios que han abandonado el país, tomando como destino de migración a Estados Unidos.

El otro país latinoamericano en la lista es Brasil, de donde habrían migrado alrededor de 2.000 millonarios debido a la recesión de la que apenas estaría saliendo la economía. El resto de los países son China, India, Turquía, Reino Unido, Francia, Rusia, Brasil, Indonesia, Arabia Saudita, y Nigeria, con la mayoría de estos viendo oportunidades de inversión en Estados Unidos.

¿Qué significaría para la economía?

Si bien es cierto que los expertos consideran que tanto los ricos como los más pobres son "inmunes" a las variables macroeconómicas y políticas, la realidad es que la fuga de millonarios significaría una sola cosa: las oportunidades de inversión dentro del país estarían mermando a niveles nunca antes vistos.

Eso se debe a que de acuerdo a distintos reportes, los millonarios serían los principales inversores en el desarrollo de grandes empresas alrededor de todo el mundo, lo que no solo significa que en el país habría menos inversiones atractivas para los grandes capitales, sino que además se estaría ralentizando el desarrollo empresarial debido a esta fuga de millonarios.

Los millonarios invertirían principalmente en el desarrollo de bienes raíces, exceptuando a los Millennials, que tendrían necesidades distintas.

Esto quiere decir que Venezuela se encuentra con una necesidad cada vez mayor de inversiones locales, algo que por diferentes motivos ha escaseado desde hace décadas, por lo que no solo deben crearse nuevas fuente para la atracción de capitales, sino que también se requiere de un mayor énfasis en el uso del dinero para el desarrollo interno.

Si bien es cierto que puede parecer que los datos revelados por el estudio no poseen una gran relevancia para el venezolano “de a pie”, la realidad es que los mismos no solo demuestran un impacto directo en el crecimiento económico local, sino también en las posibilidades de desarrollo de nuevas iniciativas emprendedoras, por lo que no deben ser ignorados.