El cambio de "mindset" con el que podría resurgir el empresariado venezolano

Desde hace varios años que vemos que la economía venezolana ha obligado a los emprendedores y empresarios a adaptarse a una variable: la dolarización. Con la caída en el precio del bolívar, todos hemos presenciado una dolarización paulatina en el país (en todos los ámbitos, excepto los sueldos), que si bien no ha llegado de manera “legal”, definitivamente está aquí.

A pesar de esto, la realidad es que la dolarización no se ha adentrado realmente en el desarrollo económico y empresarial de nuestro país, lo que podría demostrarse con la lenta (y en muchos casos errónea) adaptación de las empresas a esta nueva forma de planificar todo lo referente al funcionamiento de una empresa.

El nuevo "Mindset"

Es por eso que la mejor solución podría ser un cambio definitivo en el mindset del emprendedor y empresario venezolano, en el que toda la estructura y el manejo de la empresa deje de verse desde la óptica de los bolívares, ya que si bien es cierto que la mayoría ha adaptado los precios al mercado internacional, la realidad es que su planificación estratégica no está basada en esta mentalidad.

Este nuevo mindset no se enfocaría simplemente en una adaptación de los precios con base en la variación de los costos, sino que llevaría a una verdadera internacionalización de la empresa, desde la imagen de marca y los elementos de diseño, hasta el desarrollo de estrategias de financiamiento y comunicaciones.

Esto no surge solo en Venezuela y en la actualidad, sino Alexander Jarvis, un emprendedor e inversionista asiático, también planteaba una solución similar hace unos días, asegurando que las empresas de su región tendrían que comenzar a dejar de lado el trabajo con base en las monedas locales, para adoptar una perspectiva más globalizada.

Aunque Jarvis se enfoque solo en el uso de dólares, la realidad es que sus argumentos van dirigidos hacia cualquier divisa fuerte. Eso se debe a que él habla sobre temas como el manejo de los sueldos, hacia el interés y las posibilidades monetarias de los inversionistas, e incluso en las expectativas de expansión.

No solo eso, sino que en cuanto a los competidores, a pesar de que estos pueden surgir desde cualquier rincón del mundo, la realidad es que la mayoría de los verdaderos "rivales" se encontrarán en alguna de las grandes potencias, por lo que pensar en solo en la moneda y los competidores locales, puede disminuir el verdadero espíritu competitivo.

Las consideraciones al adoptarlo

Aun así, es importante tomar en cuenta que adoptar un nuevo mindset no es equivalente a perder la identidad nacional, o de colocar tarifas por encima de las posibilidades del consumidor nacional. Con esto tampoco nos referimos a cobrar únicamente en moneda extranjera, o de no aceptar métodos de pago locales.

El cambio en el mindset requiere un entendimiento profundo sobre lo que es emprender y competir realmente en mercados internacionales, pero también entender las variables que nos rodean y los problemas que surgen en nuestro país, tanto el de origen como el de destino.