El segundo hombre más rico del mundo cree en una semana laboral de 3 días

En una entrevista publicada en el portal web de Bloomberg, Carlos Slim, el hombre más rico de México y el segundo más rico del mundo, reveló que apoya un cambio en la semana laboral a solo 3 días de trabajo. Durante la entrevista, explica un poco la evolución de las semanas laborales y argumenta sobre por qué se deberían eliminar varios días de trabajo en las mismas.

“Históricamente mientras más avanza la tecnología y hay más progreso, se trabaja menos”, indica Slim.

“Esta sociedad requiere de mayor conocimiento, mayor experiencia y menor esfuerzo físico… Es importante que las personas no se retiren a los 50, 60 o 65. Pienso que deberían retirarse más adelante ya que ellos tienen mucho conocimiento y experiencia, y pienso que deberían trabajar 3 veces a la semana para darle espacio a los demás… Las naciones no tendrían que enfrentarse a los retiros temprano que suelen desestabilizarlas financieramente. Tener 4 días libres a la semana fomentaría muchas actividades económicas como el turismo, el entretenimiento, el deporte, la cultura y la educación. Además, en ese tiempo libre las personas podrían continuar aprendiendo cosas”, sostiene.

Cuando le preguntan sobre los efectos de este plan, él responde: “La gente no ganaría menos... Quien quiera más trabajo y más dinero tiene la opción de trabajar más. Puedes tener dos trabajos, uno de lunes a miércoles y uno de jueves a sábado… En empresas donde hay exceso de personal, como agencias gubernamentales, se podría aplicar este modelo en vez de recortar personal. Pagarías a más empleados, pero no tendrías que pagarle a nadie por retirarse muy joven. Si yo hubiera sido un trabajador cualquiera de Telmex, me habría retirado hace 22 años”.

También indica que la alta gerencia no se movería de la misma manera, pero podría ser reemplazada con más frecuencia que actualmente para darle espacio a otras personas.

Por último afirma que el trabajo de un emprendedor no tiene inicio ni fin, ya que siempre se está pensado. Los compara con los artistas, indicando que cuando uno termina una pintura u otra forma de arte, no significa que deba retirarse.