Trabajo líquido: la tendencia laboral a la que deben adaptarse los empresarios

Desde hace algunos años que las tecnologías de información y comunicación (TIC) han revolucionado la forma en la que trabajan las empresas de todo el mundo. Esto a su vez le ha dado nacimiento a una tendencia laboral de la que muchas personas no han escuchado: el trabajo líquido, o fuerza laboral líquida, que no es más que la digitalización del trabajo y tendencia FreeLancer.

Aunque sea una tendencia que vienen en ascenso desde hace varios años, la realidad es que el trabajo líquido comenzó a posicionarse hace apenas unos años, de la mano del modelo de negocio bajo demanda, y del estilo de trabajo FreeLancer. En la actualidad, aunque ya sea una realidad de la que no puede escaparse, muchos gerentes no saben cómo adaptarse.

Con esto en mente, hemos investigado sobre cuáles son los aspectos más importantes que deben tomarse en cuenta al momento de comenzar a adaptarse a esta fuerza laboral del futuro, que si bien puede convertirse en un dolor de cabeza para algunos, es una tendencia de la que ninguna empresa podrá alejarse por mucho tiempo. Los aspectos son 2:

• Liberarse de los paradigmas

Muchos teorizan que uno de los principales paradigmas que deben eliminarse es en el que se afirma que un trabajador remoto no tiene la cuota de responsabilidad y compromiso de un empleado tradicional. Si bien es cierto que existen modos de comprobar e incentivar esto, como lo explicaremos más adelante, la realidad es que el mayor problema que presentan los empleados no suele venir de ellos mismos, sino de una pobre cultura empresarial.

De la mano de este paradigma viene otro similar, que es el que indica que un empleado tradicional tiene más valor que los que trabajan de forma remota. Esto puede traer retrasos en los pagos, en la inserción empresarial, y en la correcta adecuación al grupo de trabajo. Todo esto recae en el gerente, y puede traer consecuencias negativas a la empresa.

• Tomar las precauciones adecuadas

Sin embargo, no todo viene como parte de un cambio de la mentalidad empresarial en cuanto a preconceptos, sino también prepararse para que estos trabajadores se mantengan comprometidos con la empresa, y realicen sus labores de forma puntual. Ambos problemas están entre los más reportados por quienes van en contra de la tendencia.

En cuanto al primer punto, un estudio de la firma Gallup afirma que apenas el 30% de los empleados remotos se sienten identificados con la empresa, aun cuando se comuniquen a diario con sus compañeros y gerentes dentro de la organización. Por eso recomiendan incentivar la presencia física entre 1 y 2 veces por semana. Aunque el incremento no sea demasiado, poco más del 40% de los empleados que trabajan de esta manera (1 día en oficina y el resto en casa) se sienten comprometidos con su trabajo.

En lo referente a responsabilidad, se recomienda que la empresa nunca deje de supervisar el trabajo del empleado remoto, organizando chequeos regulares sobre el cumplimiento de los objetivos. Del mismo modo, sería necesario incentivar la adopción de la cultura empresarial con la misión de que estos se sientan comprometidos a trabajar más responsablemente.

Aunque en la actualidad sea posible que algunas empresas no se adapten al trabajo líquido debido a que la naturaleza de su mercado no lo ha hecho obligatorio, como sí puede suceder con empresas más enfocadas en la tecnología, la realidad es que tendrán que ajustarse de manera veloz si no quieren comenzar a perder competitividad.