La mujer del cereal seco: "Si hubiera podido rendirme, lo hubiera hecho"

La historia de Carolyn Creswell es una mezcla de tesón, valentía y coraje, dotada de un acto de fe que le costó muchos altibajos y hoy en día ha rendido para ella innumerables frutos. Tras una ardua lucha de varios años para que su negocio no muriera, ahora su empresa vale cerca de US$60 millones, reseñó BBC.

A sus 18 años, Creswell trabajaba en una fábrica que producía muesli, un tipo de cereal mezclado con frutos secos el cual era distribuido a pequeñas tiendas y cafeterías. De esta manera subsistía económicamente mientras cursaba estudios en la universidad en la ciudad de Melbourne, Australia.

En el año 1992, los dueños de la compañía toman la sorpresiva decisión de vender el negocio, lo cual significaba que ella quedaría sin empleo. A ella le gustaba tanto su trabajo que dio un paso arriesgado sin pensarlo mucho: decidió comprar el negocio fracasado de sus jefes.

Lo anterior no era tan fácil dado que no le alcanzaban todos sus ahorros, así que convenció a su entonces compañera de trabajo Manya van Aker, de comprar con ella la empresa. Lograron ofertar 1.000 dólares australianos (US$735) oferta que fue aceptada.

Las jóvenes primeramente rebautizaron la firma llamándola Carman, según las tres primeras letras de sus nombres. No obstante, pese a su entusiasmo juvenil, las ventas no eran las esperadas y Manya dejó la compañía dos años después

A pesar del complicado panorama Creswell perseveró y, cinco años después de haber comprado el pequeño negocio, en 1997, la segunda cadena de supermercados más importante de Australia comenzó a comprar el muesli que ella producía.

Al sol de hoy Carman's Fine Food está valorada cerca de US$60 millones, mientras que Creswell ahora es conocida bajo el título de la "reina del muesli" en los medios de comunicación de su país.

Aquel discreto negocio que ofrecía pequeños productos a cafeterías, ahora se ha convertido en una enorme cadena productora de cereales para el desayuno para más de 3.000 tiendas en el país y además exporta a otros 32 países.

"No le tenía miedo a trabajar duro, pero los primeros años fueron bastantes difíciles. Si hubiera podido rendirme, lo hubiera hecho", reveló Creswell a la BBC.