Logo
Imprimir esta página

El proyecto que incentiva el emprendimiento entre estudiantes universitarios

El ENII de la Facultad de Ciencia de la UCV busca elevar el espíritu emprendedor de los estudiantes


 

 

José Antonio Fernández es profesor e ingeniero químico egresado de la Universidad Central de Venezuela. Durante los últimos semestres de su carrera se percató que necesitaba generar recursos para ayudar a su familia y para saldar sus cuentas personales, viendo el emprendimiento como la alternativa ideal para lograrlo.

Así fue cómo surgió la empresa familiar Chepa Cookies, en la que vendía hasta 14 productos diferentes al público. Al recordar esos momentos comenta: “La ingeniería química se enfoca en el proceso de fabricación y elaboración y esta experiencia fue la que me ayudó a levantar una fabrica que producía hasta 20 toneladas de producto terminado.

La llegada de la crisis los llevó a ejecutar diversos planes de contingencia debido a las expropiaciones de diversos proveedores de materia prima. La inversión en equipos y un local hizo que se quedaran sin capital de trabajo para levantar la producción, llevando la empresa al cierre técnico.

Luego de un breve periodo en el que se convirtió en coach y trabajó como facilitador en una empresa de la capital, volvió a su alma máter para hablar con una profesora sobre el tema de la generación de recursos para los estudiantes y profesores, debido al alarmante déficits de alumnos y personal docente.

Así fue como empezaron las bases de lo que hoy se conoce como Núcleo de Emprendimiento y Negocios de la Facultad de Ciencias e la UCV, un programa de formación de emprendimiento para brindar herramientas que necesitan los jóvenes para monetizar sus conocimientos y crear negocios que solucionen problemas al país. “Hacer económicamente viable lo que estoy estudiando”, señaló el ingeniero.

Los obstáculos para introducir el emprendimiento en la academia

Los obstáculos que tuvo que atravesar el profesor Fernández para plasmar su idea estuvieron ligados principalmente al desánimo que hay en el mundo académico, siendo uno de los sectores que más ha golpeado la crisis. Al ser un profesional con poca experiencia en las aulas tuvo que desarrollar muchas ideas para ganarse la confianza de sus colegas.

Así lo comentó: “Comencé a conquistar personas, pero no estoy solo, tengo a la profesora Mercy Ospina, que tiene 12 años de experiencia en la universidad, que fue la primera que creyó en la idea y juntos estamos llevando adelante este proyecto. Sin embargo sigue siendo un problema que se escapa de la universidad, es algo global producto de la situación país”, señaló.

No solamente tuvo que ganarse la aceptación de los profesores, sino también de los estudiantes, algo que el mismo Fernández señaló que era más complejo, ya que a su juicio alumnos tienen una forma de pensar completamente diferente. Para poder ganarse su confianza empezó a hacer preguntas sobre su futuro, de forma individual.

Los resultados de esta investigación le trajo resultados satisfactorios: “Me di cuenta que la mayoría cree que un negocio puesto por ellos tendría éxito. Tienen la intención, solo falta guía y acompañamiento”, comentó.

Para el ingeniero químico el objetivo principal del proyecto es evitar la deserción de profesores y alumnos: “Como transformar tus conocimientos en un negocio que te permita estudiar o trabajar dentro de la universidad”, puntualizó

El modelo de emprendimiento académico

Para poder brindar soluciones a los nuevos negocios que van desarrollando los estudiantes, en el 2020 consultaron cuánto necesita un emprendimiento local de capital semilla para arrancar sus operaciones. Luego decidieron levantar recursos mediante donaciones para dárselo posteriormente a un emprendedor en concreto.

El educador habló sobre este concurso: “Esa persona tuvo que ejecutar una serie de mecanismos para atraer a la gente al evento y así votaran por su emprendimiento”. Los ganadores fueron los miembros de un grupo denominado “Educa2 UCV”, que buscan promocionar la formación en programas de lenguaje de programación.

El núcleo les aportó el capital semilla para que sigan con su proceso de crecimiento, en el que cuentan con el acompañamiento de todo el equipo que forma parte del Núcleo de Emprendimiento y Negocios. El profesor Fernández mencionó que este año tienen la meta de apoyar a 10 emprendedores.

Para lograrlo señaló que utilizan un modelo de embudo en el que dividen cada proyecto en tres fases:

  1. Pre incubación, incubación y formación.
  2. Crecimiento.
  3. Rueda de inversión.

Ante esto el ingeniero argumentó: “El núcleo selecciona a un grupo determinado de emprendimientos y los apoya con un número de acciones, entre un 15 a 20%. Eso le da al núcleo unos ingresos que le permite ser económicamente viable.”

A su vez señaló que el objetivo en la segunda fase es que ese proyecto comience a vender, brindando las competencias pertinentes para que generen ingresos para validar los productos y servicios en el mercado, siendo esta una prueba vital de cara al futuro del proyecto.

Anunció que el próximo congreso será para el mes de junio, donde presentarán los resultados de la primera y segunda cohorte, así como la que transcurre en el presente año. Comentó también que en el 2019 fue aprobada la materia Emprendimiento Universitario, que forma parte del Programa de Cooperación InterFacultades

Perspectivas a futuro

Al preguntarle por las perspectivas a futuro el cofundador del proyecto se mostró muy optimista al respecto: “Soy positivo, debemos implementar como ir adoptando cada una de estas iniciativas a lo que conocemos, a lo que busca el cliente. Creo que las cosas llegaron para quedarse y hay que aprender a vivir con esto.”

Hizo estos comentarios en relación a lo que ha generado la pandemia en el último año, especialmente en el ámbito de los negocios. A su juicio las nuevas tendencias estarán por mucho tiempo y hay que adaptarse para seguir en crecimiento.

Consejos a los emprendedores

José Antonio Fernández aconseja lo siguiente a todas las instituciones educativas que buscan incentivar el emprendimiento entre los estudiantes: “Lo que desarrollen lo hagan usando metodologías de emprendimiento. Brindar materias, programas poniendo al cliente primero, enfocándose en las necesidades del consumidor”, señaló.

El ingeniero aspira alinear el concepto de universidad y negocio, algo que para él no se ha trabajado en mucho tiempo y es necesario hacerlo para que los estudiantes logren monetizar los conocimientos que van adquiriendo desde los primeros semestres.

Este proyecto ha generado impacto dentro de los estudiantes de la Universidad Central de Venezuela. De seguir por este camino otras instituciones podrían replicar el modelo para mejorar las competencias empresariales de los alumnos, permitiéndoles monetizar sus conocimientos.

Modificado por última vez enMiércoles, 19 Mayo 2021 14:26
Copyright ©2017 Vaia Solutions, C.A. Todos los derechos reservados.