Es el momento adecuado para que Venezuela atraiga inversionistas extranjeros

En los últimos años, Venezuela ha atravesado la peor crisis económica de su historia moderna, caracterizada en gran parte por la falta de inversiones extranjeras en nuestro territorio, cosa que ha llevado a que el desarrollo económico y empresarial se vea prácticamente detenido.

Sin embargo, esto no siempre fue así, y no es algo que se repita en el resto de los países de la región, ya que según el más reciente informa del Instituto de Finanzas Internacionales (IIF), la inversión extranjera en mercados emergentes (donde se incluye a Venezuela) se ubicó por encima de los 230 millardos de dólares, su mejor nivel en los últimos 3 años.

Es algo que ya se venía previendo desde finales del 2017, donde diferentes investigaciones aseguraban que las economías emergentes del mundo se estaban volviendo especialmente atractivas para los poseedores de grandes capitales, ya que el crecimiento estaba siendo cada vez más acelerado.

Si bien es cierto que los riesgos que presentan gran parte de estas economías es mucho mayor al de economías desarrolladas, este tipo de inversionista suele seguir la máxima de "a mayor riesgo, mayor rendimiento", lo que hace que los países en desarrollo tengan más atractivos que el resto.

La mayoría de las inversiones fueron en emisión de deuda de los principales recursos naturales de estos países, desde el petróleo y el cobre, hasta monedas locales. Sin embargo, algunas fueron mucho más diversificadas, ya fuese para incentivar el desarrollo de tecnología, bonos gubernamentales, y otro tipo de deuda.

El caso de Venezuela

Si bien es cierto que actualmente Venezuela atraviesa una serie de problemas en cuanto al marco legal que rige el país, ya que es imposible determinar la libertad y autonomía exacta que tienen las empresas, esta noticia demuestra que es el momento adecuado para comenzar a buscar inversionistas.

El hecho de que cada vez más inversionistas busquen adentrarse en los mercados emergentes no solo se refiere a las acciones de bolsa o bonos nacionales (donde Venezuela actualmente atraviesa un momento complejo), sino también en el desarrollo empresarial del país, y el interés que puede existir en tratar de capitalizar a una de las sociedades con mayores índices de consumo en la región.

Resulta importante destacar que según investigaciones de Harvard Busines Review, publicadas hace un par de meses, las probabilidades de que las grandes empresas y multinacionales vuelvan a invertir en Venezuela para mediados del 2020 son bastante altas, tomando en consideración las variables económicas, políticas y sociales actuales.

Aunque se trate de una serie de eventos que deben ir desarrollándose poco a poco, y que es imposible determinar si se cumplirán o no, conocer el interés de las grandes economías en incentivar el desarrollo de los países emergentes, es una buena noticia que debe tener en cuenta el empresariado venezolano.