Nuevo aguacate sin semilla podría ser explotado en Venezuela

Nació para prevenir la "mano de aguacate", que, aunque parezca absurdo, es un tipo de herida que se produce cuando alguien trata de extraer la semilla de un aguacate con un cuchillo.

Se trata de una nueva variación del aguacate, como lo conocemos, cultivada en España, la cual, no solo no tiene una semilla en su interior sino que su forma es más alargada y, según señala M&S, puede comerse incluso sin pelar, reportó esta semana la cadena BBC.

El fruto fue desarrollado por la cadena británica Marks and Spencer (M&S) y quienes lo han probado, aseguran que cuentan con el mismo sabor que un aguacate común y corriente.

Bien sea para prevenir el aumento de la lesión mencionada al principio o no, aseguran que actualmente existe un marcado incremento del consumo de esta fruta en muchas partes del mundo, donde países como México, de donde es originaria, han aprovechado esto.

“Estas frutas, más parecidas por su forma a una berenjena pequeña- fueron obtenidas a partir de una flor sin polinizar, que así desarrolla un fruto sin semilla”, explica la BBC. En España lo están comercializando en un paquete de seis unidades por un costo aproximado de 3 dólares.

¿Cómo puede Venezuela aprovechar esto?

Logrando traer al país las yemas de la planta para hacer un injerto, se traduciría en un abanico de posibilidades para el que quiera producir ganancias con el nuevo fruto, incluso en divisas.

¿Por qué? Es evidente que la variación de este comestible cuenta con dos elementos que lo hacen atractivo, pero más allá de esto, se observa que hay un evidente mercado demandando el consumo de esta fruta, con o sin la semilla.

El aguacate es la séptima fruta más producida en Venezuela y en 2015 alcanzó su récord de producción con 152.696 toneladas, según estadísticas de la Confederación de Agricultores de Venezuela (Fedeagro).

Aunado a lo anterior, hay evidencia de que el aguacate venezolano está siendo cada vez más atractivo para consumidores fuera de nuestras fronteras y lo podemos ver en sitios portales web de exportación de productos venezolanos.

En conclusión, todo apunta claramente a que en este momento hay un mercado que está esperando ser atendido, demandando el fruto sin semilla y, yendo más allá, si se analiza que el origen del problema es la semilla como tal, surgen más modalidades de negocio, como crear una versión enlatada, comercializarlo como “mantequilla” o picado, entre otras modalidades.