Los trabajos "poco productivos" estarían estancando los salarios globales

Desde hace algunos años hemos visto que en el mundo está incrementando de manera exponencial la cantidad de personas que se dedican a alguna tarea o trabajo, cayendo de forma exponencial el desempleo aun en las regiones donde este es más alto. Sin embargo, esto podría no ser positivo para las economías globales.

Esto ya se habría previsto recientemente con un informe de The Economist, donde la denominada "Unidad de Inteligencia" del medio afirmaba que el incremento en la cantidad de personas trabajando estaría trayendo una caída en la productividad del mundo. Un nuevo estudio apoya esta teoría.

¿Qué son los trabajos "poco productivos"?

Se trata del nuevo informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) que, de la mano de su Compendio de Indicadores de la Productividad, reveló que en el mundo está incrementando la cantidad de trabajos "poco productivos", lo que está trayendo como consecuencia un estancamiento en los sueldos que se pagan a nivel global.

Los trabajos "poco productivos" son una gama de labores en las que no se están llevando a cabo las inversiones necesarias para asegurar un crecimiento en la productividad. Desde la manufactura y el comercio, hasta la prestación de servicios profesionales, alimenticios, científicos, técnicos, de educación, entre muchos otros. Estos son considerados como poco productivos debido a que no generan mayores riquezas a las naciones.

Los datos del estudio y el estancamiento de los sueldos

El estudio afirma que, a pesar de que se ha presenciado un crecimiento en la cantidad de puestos laborales que existen actualmente, y que las inversiones para el desarrollo de fábricas y empresas de todo el mundo han incrementado también, esto no estaría siendo representativo al momento de lograr que pueda verse una mejora en la productividad. Aunque parezcan temas alejados entre sí, esto afectaría la asignación de salarios.

“La desconexión a largo plazo entre los salarios y el crecimiento de la productividad que vemos en muchos países de la OCDE también puede estar impulsando desigualdades en los ingresos y la riqueza (...) Disminuir el ritmo del crecimiento de la productividad y la gran cantidad de empleos de baja productividad que se crean limitan el alcance de las mejoras en el bienestar material”, afirmó Martine Durand, Directora de Estadística de la OCDE.

¿Qué significa esto para el planeta?

De acuerdo al estudio esto solo significa una cosa, para las empresas y para los trabajadores por igual: es momento de comenzar a trabajar de forma más inteligente, en vez de “más duro”. Este será el único modo para que la productividad global comience a incrementar a la par de la cantidad de trabajos que surgen anualmente.

De no hacerlo, podríamos enfrentarnos a una situación económica compleja, ya que no solo veremos un estancamiento total en el incremento de los sueldos (aun cuando la inflación global continúa avanzando), sino que además tendremos que presenciar un estancamiento generalizado de las economías de cada región, aun cuando en el pasado pudiesen haber sido prometedoras.