La urea: una gran oportunidad de ingresos para Venezuela a causa de la guerra entre Ucrania y Rusia

Las relaciones internacionales pueden influir fuertemente en la economía mundial, especialmente cuando se trata de naciones de gran tamaño y poderío financiero. Por ello es que ha generado tanta incertidumbre las hostilidades entre Ucrania y Rusia. Estos países influyen directamente en muchos rubros primarios, lo que afectaría a naciones que dependen de estos sectores para su subsistencia.

Para conocer más al respecto El Emprendedor entrevistó a Saúl López, presidente de la Sociedad Venezolana de Ingenieros Agrónomos y Afines. El ingeniero señaló: “Lo que es el comercio agrícola internacional depende muchísimo de factores externos desde el punto de vista del mercado y la economía global. En estos momentos se ha reportado el aumento en el precio de muchos commodities, además de los fertilizantes, que se han incrementado en un 116%. En este sentido, la pandemia afectó en gran medida la fabricación y distribución de fertilizantes, generando una reducción en la oferta por el cierre de varias empresas en la Unión Europea”.

Esto provocó que el mercado dependiera de una especie de oligopolio entre las empresas de Rusia, China y de la India, que son los mayores oferentes en la actualidad. “Si Rusia genera un conflicto bélico con Ucrania va a afectar la economía, especialmente lo que es la oferta de productos fertilizantes tanto de Rusia como de Ucrania. Por otro lado, gran parte de los fertilizantes NPK importados a Venezuela en los últimos tres años provienen de Rusia, y esta hostilidad provocará que estos rubros sean más costosos por la ley de oferta y demanda”, explicó el vocero.

¿Está preparado el productor venezolano para enfrentar una escasez de fertilizantes?

Ante una posible situación de escasez de fertilizantes, los principales afectados serán los productores y empresarios agrícolas. Saúl López señaló que algunos se han planificado adecuadamente y previeron los efectos de esta coyuntura.

“Algunos se han preparado, sobre todo asociaciones de productores, también los que están financiando el sector primario que anticiparon el conflicto y compraron los fertilizantes con mucha anticipación. Sin embargo, los pequeños y medianos productores y los que no están agremiados son los que no están preparados ni para incorporar ese incremento del doble en sus costos de producción ni poder sortear la escasez. Por ende, nosotros hemos insistido en la importancia de que incorporen en los costos de producción ese acompañamiento y asesoría para hacer análisis de suelos junto a la agricultura inteligente”, expresó el gremialista.

El especialista señaló que con esta práctica se disminuiría la utilización de fertilizantes y se haría un uso más óptimo de los suelos. A su vez, esto incorporaría otras alternativas como fertilizantes foliares, nanofertilizantes que ya están registrados en el país y el abono orgánico. Todo esto ayudaría a disminuir los costos al agricultor y aumentaría la producción.

“Por otro lado, es necesario resolver desde el punto de vista político el tema de Monómeros. En este sentido, se requiere que haya una oferta para Venezuela de esa empresa por una vía jurídica para tener un producto legal y a un precio que será mucho más competitivo que traerlo de Rusia. Por ende, es importante que ese conflicto se resuelva para que haya más oferta y sea más económica para nuestros productores”, explicó el ingeniero.

¿No existen otros proveedores en el mercado internacional con el que se pueda negociar?

Saúl López mencionó que en el mercado sí existen otros proveedores internacionales de fertilizantes, pero la materia prima como la urea, Fosfato de Amónico, MAG, Sulfomag y muchos más provienen de Rusia. Sin embargo, señaló que Venezuela tiene una gran ventaja que podríamos aprovechar: “La urea venezolana es la más económica de la región, porque el precio de venta en el mercado internacional supera los 700 USD en Venezuela el precio a los distribuidores ronda los 150 USD la tonelada”.

De esta manera, señaló que es el momento propicio para reactivar las plantas mezcladoras y la industria de fertilizantes para formular en el país. “Esto es una gran oportunidad, ya que tendremos una fuente constante de nitrógeno con una urea muy económica, lo que ayudaría a abaratar los costos de producción del NPK.”, explicó.

¿Pueden aparecer nuevos capitales y marcas que aprovechen esta coyuntura para captar mercado?

A pesar de la gran incertidumbre que ha provocado esta situación, el ingeniero indicó que esto podría generar una gran oportunidad de negocios para quien quiera aprovecharlo. “Todo estaría en relación a las plantas de fertilizantes, cuya inversión estaría alrededor de los 5 millones de dólares. Esto permitiría que junto a la urea nacional, más lo que se importe de potasio tener un fertilizante de calidad y competitivo en relación al mercado internacional. Esto nos daría más autonomía y ayudaría a blindar al sector agrícola para que no se detengan en momentos de crisis como este”, finalizó.

De esta manera, solo queda esperar el desenlace del conflicto entre Rusia y Ucrania. Ambos países tienen un gran peso en la economía internacional, así que los efectos se verán de forma inmediata. Mientras tanto, el gobierno debe anticiparse a este hecho para crear las políticas adecuadas que permitan reactivar la industria petroquímica para aprovechar el potencial que tiene el país.