Autor de "¿Optimista, yo?" apuesta por entender el por qué y el para qué de los fracasos

Algunas personas suelen ver el fracaso como algo netamente negativo. Muchos sienten temor a tomar riesgos luego de encontrarse con los primeros tropiezos. Es por eso que las personas deben estar atentas para poder tomar las experiencias negativas y re-direccionarlas hacia el éxito.

Es importante que nuestras sociedades empiecen a eliminar los preconceptos que se tienen sobre el fracaso, en los cuales quien fracasa es alguien poco preparado o desinteresado. Somos humanos, y a veces, no importa que tan preparado se está, se puede cometer un error que nos lleva a esa situación coyunturalmente difícil.

Álvaro Pérez Kattar indica que lo importante no es solo aceptar que se fracasó, sino entender por qué y, más importante aún, para qué, con el objetivo de tomar todo lo que podamos de esta experiencia. Es por eso que invita a la gente a tomar riegos, ya que si bien en algunos se salga bien parado, en otros se obtiene algo, si se quiere, igual de importante como lo es el conocimiento.

Promueve a aprender a ser fuerte ante estos eventos. A ser capaces de no perder el tiempo lamentándonos, sino reconocer que las herramientas de nuestro entorno pueden ayudarnos a recolectar el lado positivo de la situación. "Si este ‘fracaso’ te permitió reconectar con lo que eres y clarificar tu horizonte, no desistas en ir en su búsqueda. Quizás debas cambiar la ruta por un momento, pero no la pierdas de vista".

Esta opinión refleja la necesidad de cambio de perspectiva que se tiene sobre este tema en nuestra sociedad. En otras partes del mundo el fracaso suele verse como algo normal y quienes se levantan no son vistos como gente no confiable, sino como los pilares de esa sociedad. ¿Por qué nosotros no podemos permitimos lo mismo?